CIUDAD DE GUATEMALA.- Al menos seis personas murieron, incluido un niño, y doce resultaron heridas en un ataque armado perpetrado este miércoles por pandilleros en un hospital de Ciudad de Guatemala para rescatar a un compañero detenido.
El ataque ocurrió cuando un preso, miembro de la pandilla Mara Salvatrucha, llegó al Hospital Roosevelt de Ciudad de Guatemala para una cita médica y otros miembros de la pandilla llegaron disparando desde un auto para liberarlo, según la policía.
Los delincuentes armados ingresaron a la sala de emergencia del hospital para liberar al reo Anderson Daniel Cifuentes, de 29 años, quien guardaba prisión por homicidio y asociación ilícita.
Entre las víctimas figuran dos guardias del Sistema Penitenciario (SP), un niño de ocho años y un particular, señaló una fuente del centro de salud.
La fuente, que pidió no citar su nombre, comentó que debido a la emergencia suspendieron el servicio de consulta externa del hospital.
El subdirector técnico del hospital, Antonio Barrientos, aclaró que entre las víctimas no figura ningún médico, pero sí un guardia del lugar.
En tanto, el director de la Policía Nacional Civil, Nery Ramos, comentó que fueron capturados cinco pandilleros que cometieron el ataque, aunque el reo trasladado al hospital no ha sido localizado.
Ramos indicó que los atacantes dejaron un vehículo abandonado, en cuyo interior había varias armas de fuego.
El director policiaco aseguró que el ataque fue directo contra guardias del Sistema Penitenciario para rescatar a Cabrera, quien fue trasladado hacia ese centro asistencial por orden de un juez.
Un guardia penitenciario que sufrió una herida de bala en el brazo izquierdo, dijo a la AFP que logró sobrevivir al tirarse al suelo.
El gobierno del presidente Jimmy Morales repudió y lamentó el ataque armado.
"Expresamos nuestras condolencias y solidaridad a las familias de las víctimas", dijo en rueda de prensa el vocero presidencial, Heinz Heimann.
El Procurador de los Derechos Humanos (PDH), Jorge de León Duque, lamentó también el ataque armado al considerar que el hecho "refleja la debilidad del Estado, del sistema de justicia, en atender (a reos de alta peligrosidad) en los hospitales".
De León consideró que "la población tiene razón de sentirse indignada, estar molesta y no confiar en los funcionarios públicos".
Los reos que padecen algún quebranto de salud son trasladados a hospitales públicos por orden judicial para su atención debido a la carencia de hospitales o medicamentos en las prisiones.
Guatemala vive una ola de criminalidad que deja cerca de 6.000 muertes por año, casi la mitad de las cuales están ligadas a las actividades del narcotráfico y a las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, dedicadas principalmente a la extorsión a comercios y medios de transporte.