LA PAZ.- El Gobierno boliviano considera positivo el resultado de las primarias presidenciales llevadas a cabo este domingo por primera vez en Bolivia, mientras que la oposición habla de un fracaso por la baja participación en las votaciones.
El Presidente del país, Evo Morales, logró un 36,5% de respaldo de sus militantes, mientras que los candidatos opositores alcanzaron entre el 3 y el 7%, con el escrutinio de entre el 80 y el 90% de los votos, según los últimos datos entregados por el órgano electoral.
El ministro de Comunicación de Bolivia, Manuel Canelas, señaló que "no han triunfado algunos esfuerzos menores de sabotear la elección" y "amagos de no permitir el libre desarrollo" de la votación, por parte de colectivos que consideran ilegal la candidatura de Morales.
El ministro lamentó que los opositores hayan llamado a votar solo al mínimo de sus militantes necesarios para habilitar sus candidaturas de cara a las elecciones generales de octubre en Bolivia.
Por esto, su impresión fue "bastante positiva", con más del 36% de apoyo a Morales, que espera que llegue al 40% al final del conteo.
"El resultado es bastante bueno", teniendo en cuenta que las primarias se realizaron por primera vez en Bolivia. Al respecto, manifestó que en ningún país se llega al 80 o 90% de participación en unas primarias, por lo que el resultado en Bolivia es a su juicio similar a cualquier sistema en el que el voto no es obligatorio.
El análisis de esta situación fue totalmente distinto desde la oposición, ya que sus principales líderes coincidieron en calificarlas como un "fracaso".
"Las primarias fueron un fiasco", escribió en su cuenta Twitter el ex Presidente boliviano Carlos Mesa, candidato de la alianza Comunidad Ciudadana y uno de los mejor evaluados en las encuestas.
Mesa añadió que casi el 70% de sus militantes "le dijo NO! a Evo Morales", quien "no pudo legitimarse ni ante sus votantes". "Nuestra decisión de no votar fue seguida por el 95% de nuestros inscritos", comentó respecto al boicot anunciado por su candidatura.
"No han triunfado algunos esfuerzos menores de sabotear la elección"
Manuel Canelas, ministro de Comunicación de Bolivia
El senador Óscar Ortiz, candidato de Bolivia Dice No, aseguró en la misma red social que el gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales "fracasó".
"El MAS tiene menos de 40% de los votos. Evo Morales ha sido deslegitimado por su propia militancia, debe renunciar a su candidatura", advirtió.
Por su parte, el ex vicepresidente boliviano Víctor Hugo Cárdenas, de Unidad Cívica Solidaridad, habló de una "humillante derrota de Evo", a quien "el MAS no le quiere", y consideró los resultados un "réquiem por el masismo" y el "evismo".
A la votación estaban convocados 1.715.880 militantes de nueve organizaciones políticas y alianzas, para pronunciarse sobre sus candidatos de cara a las elecciones generales de octubre.
El órgano electoral habilitó la candidatura de Morales para un cuarto mandato en base a un fallo del Tribunal Constitucional de Bolivia, que estableció el derecho a la reelección indefinida.
La oposición argumenta que debe prevalecer la Constitución del país, que limita a dos los mandatos consecutivos, y un referéndum que negó a Morales la posibilidad de eliminar ese límite.