El juicio que sentó este martes en el banquillo a la ex Presidenta de Argentina Cristina Fernández (2007-2015) es el séptimo contra un ex Jefe de Estado de ese país desde la vuelta de la democracia en 1983, tras los procesos contra Carlos Menem (1989-1999) y Fernando De la Rúa (1999-2001).
Estos son los juicios orales y públicos celebrados desde el fin de la última dictadura contra presidentes democráticos, todos iniciados varios años de después de comenzar las investigaciones y luego de que abandonaran el poder:
Carlos Menem y el contrabando de armas (octubre de 2008)
El primer proceso oral y público que se celebró en Argentina contra un ex gobernante democrático sentó en el banquillo a Menem, en ese momento de 78 años, por tráfico de armas a Ecuador y Croacia entre 1991 y 1995, junto a otros procesados.
Por esta causa, el ex Mandatario -cuya última candidatura a la Presidencia fue hace 16 años- llegó a estar en prisión preventiva seis meses en 2001, pero recuperó la libertad luego de que la Corte Suprema de Justicia anulara los cargos.
Posteriormente, en 2005, con su elección como senador, cargo que ocupa hasta hoy, despejó cualquier posibilidad de volver a ser detenido, al contar con fueros.
En 2011 fue absuelto, pero en 2013 otro tribunal lo revocó y le condenó a siete años de prisión por considerarlo "coautor" de contrabando agravado de material bélico.
La sentencia fue confirmada en 2017, pero en octubre del año pasado la Cámara de Casación lo absolvió al considerar que se superó el "plazo razonable" en la causa -el litigio se demoró de manera prolongada, durante dos décadas-.
Fernando De La Rúa y los sobornos en el Senado (agosto de 2012)
Fernando de la Rúa, que renunció a la presidencia en diciembre de 2001 en medio de la peor crisis política, económica y social que ha vivido Argentina, fue sometido a juicio por su presunta responsabilidad en un caso de sobornos en el Senado en el año 2000 para la aprobación de una polémica reforma laboral.
La polémica llevó al entonces vicepresidente del país y presidente del Senado, Carlos Álvarez, a presentar su renuncia en octubre de 2000.
Si bien la Fiscalía había solicitado una pena de seis años de prisión para De la Rúa, imputado como presunto coautor del delito de cohecho activo agravado, finalmente fue absuelto en diciembre de 2013, 14 meses después del inicio de la vista, al igual que los otros siete acusados.
Menem, las cuentas en Liechtenstein y Suiza y los aviones ultraligeros (septiembre de 2013)
Al declarar prescrita la acción penal, en septiembre de 2013 un tribunal absolvió a Menem por presunta falsedad en su declaración de bienes del año 2000 y por omitir en ella una cuenta en el principado de Liechtenstein con seis millones de dólares, otra en Suiza por valor de 600.000 dólares y dos aviones ultraligeros.
Los fondos de ambas cuentas permanecieron congelados a instancias de la Justicia suiza, que investigaba al ex Presidente por "posible lavado de dinero".
El pago de sobresueldos (marzo de 2015)
El tercer juicio a Menem afectó también a algunos ex altos cargos de su Gobierno como los ex ministros de Economía, Domingo Cavallo, y de Defensa, Oscar Camilión, y la ex secretaria de Medio Ambiente, María Julia Alsogaray, acusados todos del delito de "peculado" (malversación de fondos públicos).
En diciembre de 2015,
la Justicia condenó al ex Mandatario a 4 años y medio de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
Se consideró que Menem fue responsable de organizar un sistema de sustracción de fondos reservados de inteligencia para distribuirlos de manera ilícita entre los ministros y secretarios durante sus dos mandatos presidenciales.
La Cámara Federal de Casación confirmó la pena en octubre pasado, aunque seguirá sin ser detenido por su condición de aforado.
El atentado a la mutual judía AMIA de 1994 (agosto de 2015)
De nuevo, Menem se sentó ante el juez. Esta vez para juzgar su presunta responsabilidad en las irregularidades detectadas en el primer juicio del atentado a la mutual judía AMIA de Buenos Aires, que dejó 85 muertos en 1994 y sigue impune.
El octogenario senador llegó a estar acusado de los delitos de "abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público y encubrimiento" , y la Fiscalía solicitó para él 4 años de prisión, la misma pena que pedían las querellas, encabezadas por organizaciones de la comunidad judía.
En la causa se juzgaron diversos hechos en torno al primer proceso judicial por el ataque, que comenzó en 2001 y concluyó en 2004 con la declaración de nulidad de toda la investigación y la absolución de los policías argentinos imputados, a quienes se había acusado de integrar la conocida como "conexión local".
Finalmente, en febrero de 2019, Menem fue uno de los cinco imputados absueltos, aunque ocho personas fueron condenadas, entre ex policías, ex fiscales y ex espías.
Carlos Menem y la venta de un solar (junio de 2018)
Hace casi un año comenzó el último de los juicios que han tenido a Menem como protagonista, que culminó el 27 de marzo pasado con una nueva condena contra el ex Jefe de Estado, esta vez a tres años y nueve meses de prisión por fraude en la venta en 1990 a precio vil de un inmueble que pertenecía al Estado a la Sociedad Rural Argentina, una de las mayores patronales agrarias del país.
Esta causa se inició en 1992 y se alargó por más de 25 años.
A sus 88 años, el veterano político sigue investigado por la justicia y procesado por el delito de "estrago doloso agravado" en el caso de la explosión de una fábrica militar en la provincia de Córdoba, en 1995, que dejó 7 muertos y 30 heridos.
Cristina Fernández y los negocios con la obra pública (mayo de 2019)
La ex Presidenta argentina y actual senadora Cristina Fernández es juzgada desde este martes, apenas tres días después de anunciar que se presentará a la Vicepresidencia en las elecciones de octubre próximo, por haber encabezado supuestamente durante su mandato una asociación ilícita y cometer fraude en perjuicio del Estado en la adjudicación de contratos de obra pública.
Procesada en una decena de causas, la mayoría por presunta corrupción,
Fernández considera que es víctima de una persecución judicial impulsada desde el Gobierno de su sucesor Mauricio Macri y este juicio un "nuevo acto de persecución" y una "cortina de humo" para "distraer" de la crisis económica que vive el país.