Al menos nueve integrantes de un grupo disidente de las FARC murieron en una operación militar de gran escala desarrollada en una zona rural de San Vicente del Caguán, antiguo bastión de esa guerrilla en el sur de Colombia, informó este viernes el Ministerio de Defensa.
Entre los muertos en la operación, que incluyó un
bombardeo y un desembarco aéreo, está uno de los cabecillas de ese grupo de disidentes identificados con el alias de
"Gildardo Cucho", afirmó por su parte el
Presidente colombiano, Iván Duque, en un acto en la ciudad de Sincelejo.
"Anoche autoricé al Comando Conjunto de Operaciones Especiales a adelantar una operación ofensiva contra esta cuadrilla de delincuentes narcoterroristas que son residuales de lo que se conocía como las FARC y que hacen parte de las estructuras criminales que pretenden ahora desafiar a Colombia", dijo Duque.
Lo anterior ocurrió un día después de la declaración del antiguo líder de la guerrilla, Luciano Marín, alias "Iván Márquez", quien anunció que junto a otros ex guerrilleros decidieron apartarse del tratado de paz por la "traición del Estado a los acuerdos de La Habana" y retomar la lucha armada.
En su cuenta de Twitter, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, aseguró que "los delincuentes están advertidos: se entregan o serán vencidos", razón por la que se puso en marcha la operación en San Vicente del Caguán, municipio que fue sede de los fallidos diálogos de paz con las FARC durante el Gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002).
"Anoche autoricé al Comando Conjunto de Operaciones Especiales a adelantar una operación ofensiva contra esta cuadrilla de delincuentes narcoterroristas que son residuales de lo que se conocía como las FARC y que hacen parte de las estructuras criminales que pretenden ahora desafiar a Colombia"
Iván Duque, presidente de Colombia
La operación fue posible gracias a
"una labor estratégica meticulosa e impecable" que hizo posible una operación en la que
"con todo el rigor cayó 'Gildardo Cucho', cabecilla de esa organización", explicó Duque.
"Este criminal dedicado al narcotráfico, al secuestro, a la intimidación de líderes sociales pretendía ser parte de esa estructura amenazante que ayer se presentaba al país como una nueva guerrilla, cosa que no es, porque es una cuadrilla de narcoterroristas", añadió el mandatario.
En opinión del presidente, con este ataque los disidentes "ya empezaron a recibir los mensajes claritos" en referencia a que el Estado los perseguirá.