Un sismo de magnitud 6,4 golpeó Puerto Rico antes del amanecer del martes, dentro de una serie de temblores en el territorio que causó graves daños en algunas zonas.
En un primer momento se emitió una alerta de tsunami para Puerto Rico y las Islas Vírgenes Estadounidenses, pero esta fue cancelada más tarde.
Por su parte, la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico reportó un apagón en toda la isla tras el movimiento telúrico.
El Servicio Geológico de Estados Unidos situó el epicentro justo al sur de la isla del Caribe a una profundidad de 10 kilómetros. En un principio estimó la magnitud del temblor ocurrido a las 4:24 hora local en 6,6, pero más tarde bajó la cifra a 6,4.
Albert Rodríguez, que vive en Guánica, una localidad costera en el suroeste del territorio, dijo que las alarmas de aviso de tsunami se apagaron antes de que las autoridades cancelaran la alerta, y que había daños generalizados en su barrio.
"La calle se agrietó en el medio y se levantó", señaló.
Por otro lado, Víctor Huérfano, director de la Red Sísmica de Puerto Rico, manifestó a The Associated Press que no tenía reportes inmediatos de daños o víctimas porque las comunicaciones estaban cortadas en gran parte de la isla. Las autoridades en la ciudad sureña de Ponce le habían informado de daños generalizados, añadió.
"Esperamos que este sea el mayor (terremoto por ahora)", señaló. "Las réplicas van a seguir por un tiempo".
La gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vasquez, sostuvo a la emisora Radioisla poco antes de las 6 de la mañana que no había reportes de víctimas mortales. Además, indicó que las oficinas del Gobierno cerrarían durante el día e instó a los ciudadanos a mantener la calma y esperar a que se hiciera de día para comprobar el estado de sus casas.
El temblor de magnitud 5,8 del lunes por la mañana destruyó cinco viviendas en Guánica y causó graves daños en docenas de casas. También provocó pequeños aludes de tierra y apagones. Asimismo, el sismo desarmó una formación rocosa en la costa que formaba una ventana circular, conocida como Punta Ventana y que era un popular destino turístico en la población de Guayanilla, en el suroeste de la isla.
Ese primer movimiento telúrico, seguido por sismos de menor intensidad, causó temor entre los vecinos del sur de la isla, que no se atrevían a volver a sus casas por miedo a que otro sismo derribara los edificios.
Huérfano, director de la Red Sísmica de Puerto Rico, indicó el lunes que los sismos superficiales estaban ocurriendo a lo largo de tres fallas ubicadas en la región suroeste de la isla: Valle de Lajas, Punta Montalva y el Cañón de Guayanilla. Y explicó además que los temblores suelen producirse cuando la placa norteamericana y la placa del Caribe aprietan Puerto Rico.
Puerto Rico sufrió uno de sus peores y más dañinos terremotos en octubre de 1918, cuando un sismo de magnitud 7,3 cerca de la costa noroeste desencadenó un tsunami y mató a 116 personas.
