Estados Unidos aseguró estar "decepcionado" por la decisión de Londres de aprobar una participación limitada de la empresa china Huawei en su red móvil 5G, dijo el martes una de las autoridades de Gobierno.
La decisión de Londres, después de una reunión del Consejo de Seguridad Nacional presidida por el Primer Ministro Boris Johnson, se produjo poco después de que Bruselas dijera que permitiría a Huawei un papel 5G limitado en la Unión Europea.
Por lo que Gran Bretaña tomó esta decisión a pesar de las fuertes presiones de las autoridades estadounidenses sobre Europa y en particular sobre el Reino Unido.
"Estados Unidos está decepcionado por la decisión de Reino Unido", expresó un representante del Gobierno de EE.UU. a AFP. "No hay opción segura para que proveedores no confiables controlen cualquier parte de una red 5G", agregó.
Mientras que el Primer Ministro británico aseveró "no hay ninguna razón por la que no podamos hacer beneficiar a nuestros consumidores y empresas con esa fantástica tecnología y, al mismo tiempo, preservar nuestra seguridad".
Tecnología e infraestructura sensible
Huawei no estará implicada en las partes centrales sensibles de la red, sino en infraestructuras menos importantes, con una participación en el mercado limitada al 35%.
La ministra de Cultura y Asuntos Digitales de Reino Unido, Sally Morgan, justificó la decisión en la necesidad de encontrar un equilibrio entre la necesaria actualización de las infraestructurasde comunicación británicas y la defensa de la seguridad nacional.
Huawei seguirá siendo considerado un "proveedor de alto riesgo" por el Gobierno británico, por lo tanto, podrá participar en las infraestructuras menos sensibles, como las antenas o las estaciones repetidoras. Y no podrá tener contacto con las centrales nucleares o las instalaciones militares.
"Los proveedores de alto riesgo nunca han estado y nunca estarán en nuestras redes más sensibles", aseguró la Secretaria de Estado Nicky Morgan.
Presiones de EE.UU.
Washington lleva muchos meses exigiendo a los países europeos, y en particular al Reino Unido, que excluyan a Huawei de sus redes,alegando sus estrechos vínculos con el Gobierno chino y el riesgo de espionaje que esto implicaría, algo que el grupo chino siempre ha negado.
"Continuamos instando a todos los países a evaluar cuidadosamente la seguridad nacional a largo plazo y los impactos económicos de permitir que los proveedores no confiables accedan a la importante infraestructura de red 5G", concluyó el representante del Gobierno estadounidense.
Johnson, en cambio, prefirió priorizar los intereses británicos, ya que los operadores de telecomunicaciones nacionales lo impulsan a trabajar con el grupo chino ante el riesgo de que se retrase el desarrollo de la red 5G y esta se vuelva más costosa.
