Luigi Mangione, el sospechoso de matar en Nueva York al director ejecutivo de la aseguradora médica UnitedHealthcare, era hasta el lunes un desconocido joven prometedor de familia adinerada que estudió en una universidad de élite y al que le apasionaban los videojuegos.
Ahora, el joven de 26 años está imputado en Nueva York por asesinato en primer grado y por tres cargos relacionados con la posesión de armas por la muerte del CEO de la aseguradora, Brian Thompson, y permanece recluido en una celda de máximo nivel en una cárcel de Pensilvania (EE.UU.).
El joven, que fue detenido el lunes en un McDonald's de este estado tras seis días de intensa búsqueda por parte de la Policía, también está acusado en Pensilvania de cinco delitos relacionados con posesión de armas y falsificación de identidad.
El martes se le vio gritar y forcejear con los policías que lo custodiaban hacia un tribunal en Pensilvania, vestido con un traje naranja, para una audiencia sobre su extradición a Nueva York. Mientras descendía de un vehículo policial Mangione logró gritar: "¡Esto es completamente injusto y es un insulto a la inteligencia del pueblo estadounidense!".
Más temprano, el jefe de detectives del Departamento de Policía de Nueva York, Joseph Kenny, declaró en un programa de televisión matutino que tuvo "la oportunidad de leer el manifiesto" que le encontraron al momento del arresto. "Está escrito a mano. Da algún indicio de que está frustrado con el sistema de atención médica en Estados Unidos", explicó.
Kenny dijo que el detenido denunciaba en el manifiesto que el sistema de salud estadounidense es uno de los más caros del mundo y, sin embargo, el país tiene una esperanza de vida menor a la de otras naciones desarrolladas.
"Escribía mucho sobre su desdén por las corporaciones estadounidenses y particularmente por la industria de la salud", sostuvo el oficial.
Este caso ha llamado notablemente la atención del público, en parte por los detalles que van saliendo de la vida de Mangione y por su extensa huella digital que arroja luz sobre sus gustos y opiniones.
Familia adinerada y educación de élite
Por ahora, se sabe que Mangione nació y creció en Maryland en el seno de una familia acomodada dueña de varios clubs de música country, centros de salud y compañías inmobiliarias, según CBS News.
Así, sus abuelos paternos, Nicholas y Mary, fundaron la empresa de residencias de ancianos Lorien Health Systems -donde el sospechoso trabajó temporalmente como voluntario- y dirigieron WCBM, una cadena de radio de Baltimore de tinte conservador.
De acuerdo con CNN,
su familia también dirige una fundación familiar que tiene casi 4,5 millones de dólares en activos y además ha sido durante mucho tiempo una de las benefactoras de la Universidad Loyola de Maryland, de carácter privado y religioso.
El acusado es, además, primo del congresista republicano Nino Mangione.
La ideología política de Luigi Mangione es algo más ambigua: en sus redes sociales seguía a figuras públicas y controvertidas como el podcaster Joe Rogan, el antivacunas y futuro secretario de Salud Robert F. Kennedy Jr. o Edward Snowden.
En su cuenta de Goodreads -una aplicación en la que los usuarios puntúan y reseñan libros- valoró positivamente el libro del terrorista estadounidense Theodore Kaczynski, más conocido como "Unabomber", al que calificó como un "revolucionario político extremo".
Sobre el manifiesto de "Unabomber", anotó: "cuando todas las formas de comunicación fallan,
la violencia es necesaria para sobrevivir. Puede que no te gusten sus métodos, pero ver las cosas desde su perspectiva no es terrorismo, sino guerra y revolución".
Mucho antes de estos hechos, Mangione fue el estudiante con mejores calificaciones de su promoción en el prestigioso instituto Gilman School de Baltimore, y en 2020 se graduó en ciencias de la computación con especialización en matemáticas por la Universidad de Pensilvania, una de las exclusivas "Ivy League".
Allí formaba parte de Etta Kappa Nu, una sociedad académica que admite cada año a un número muy limitado de estudiantes, según el New York Times.
Unos problemas de espalda que le impedían hacer vida normal
La última dirección que se conoce de Mangione está en Hawaii, donde vivió unos meses, primero en un espacio de coliving llamado Surfbreak y posteriormente en un departamento.
R.J. Martin, fundador de Surfbreak, contó al New York Times que Mangione tenía "problemas de espalda" y que su columna "estaba desalineada", lo que le impedía hacer vida normal.
El dolor de espalda se agravó tras un incidente de surf y en 2023 Mangione volvió a la Costa Este del país para someterse a una operación. En un momento dado, dejó de responder a los mensajes de Martin.
En los últimos meses Mangione había desaparecido de la vida de su familia y amigos, algunos de los cuales le dejaron mensajes en sus redes sociales: "Nadie sabe de ti desde hace meses, y aparentemente tu familia te está buscando", decía uno de los post, de acuerdo con CNN.
La mayoría de sus seres queridos no sabían de su paradero hasta el lunes, cuando la Policía reveló que es el principal sospechoso de matar a tiros a Brian Thompson.