Milei y González Urrutia salieron a saludar desde el balcón de la Casa Rosada.
AP
Javier Milei se reunió en la Casa Rosada con Edmundo González Urrutia, el excandidato presidencial de Venezuela que reclama el triunfo sobre Nicolás Maduro y que pretende asumir en su país, pese a que el líder chavista organizó su toma de posesión para el 10 de enero.
El jefe de Estado argentino recibió al expostulante venezolano con el protocolo oficial previsto para los mandatarios electos y conversó con él durante media hora en el despacho presidencial.
Luego, ambos salieron a saludar desde el balcón de la sede de gobierno a miles de venezolanos radicados en Argentina que agitaban banderas de su país en la Plaza de Mayo y que habían aguardado durante horas para ver al referente que buscó desbancar al chavismo en las elecciones de julio pasado.
La cancillería trasandina ya dijo en comunicados oficiales que González Urrutia fue el "ganador indiscutido" de los comicios de julio de 2024. Durante la reunión, Milei le transmitió a González Urrutia que "la Argentina no será cómplice del silencio frente a las injusticias y los atropellos del régimen de Maduro". "Nuestra postura es clara: libertad, justicia y democracia para todos los venezolanos", dijo.
El presidente trasandino no estuvo solo durante la audiencia. El canciller Gerardo Werthein y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, formaron parte del encuentro y los acompañaron al balcón de la sede de gobierno. González Urrutia, por su parte, estuvo acompañado por su esposa, Mercedes López.
De acuerdo al comunicado oficial del gobierno argentino, durante la reunión Milei subrayó la necesidad de "fortalecer la colaboración regional para construir una Latinoamérica próspera y libre del yugo opresor de cualquier tipo de gobierno de dudosa calidad democrática". En una conferencia de prensa posterior en la Cancillería, González Urrutia devolvió gentilezas y reclamó por "la liberación de los argentinos detenidos en Venezuela", en referencia al caso del gendarme Nahuel Gallo, un gesto que fue agradecido por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En su declaración ante la prensa, de la que también participó el canciller argentino Gerardo Werthein, González Urrutia ratificó su intención de regresar a Venezuela para tomar posesión del mando presidencial, en la misma jornada en la que tiene previsto hacerlo Nicolás Maduro. "Por obvias razones no voy a revelar cómo lo haremos", dijo el dirigente venezolano en el Palacio San Martín.
Más temprano, al entrar en contacto con la Plaza de Mayo, colmada por venezolanos que forman parte de la diáspora, González Urrutia estuvo visiblemente emocionado. Él y Milei levantaron los puños en alto y saludaron a la multitud, que los vivaba. "Gracias Milei", "Hasta el final", "No tenemos miedo", gritaban los venezolanos que asomaban entre las banderas de su país y las de Argentina.