El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, propuso este domingo a su homólogo de Venezuela, Nicolás Maduro, intercambiar a 252 venezolanos deportados desde Estados Unidos y encarcelados en su país por la misma cantidad de "presos políticos" que mantiene el gobierno venezolano.
La oferta se produjo después de que el presidente Donald Trump arremetiera contra los jueces de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos que el sábado ordenó detener las expulsiones como la de los venezolanos, que Washington inició hace un mes bajo una ley de tiempos de guerra.
El gobierno de Bukele es un aliado clave de Trump en su política antiinmigrantes y recibió
en poco más de un mes a 288 deportados, 252 de ellos venezolanos, que están presos en una megacárcel salvadoreña de máxima seguridad.
"Quiero proponerle un acuerdo humanitario que contemple la repatriación del 100 % de los 252 venezolanos que fueron deportados, a cambio de la liberación y entrega de un número idéntico (252) de los miles de presos políticos que usted mantiene", dijo Bukele en un mensaje en la red social X dirigido a Maduro.
El Mandatario salvadoreño aseguró que todos los venezolanos que están en El Salvador "bajo custodia" fueron detenidos en Estados Unidos "en el marco de una operación contra pandillas como el Tren de Aragua".
"A diferencia de nuestros detenidos, muchos de los cuales han asesinado, otros han cometido violaciones, y algunos incluso habían sido arrestados en múltiples ocasiones antes de ser deportados, sus presos políticos no han cometido ningún delito", le dijo Bukele a Maduro.
"La única razón por la que están encarcelados es por haberse opuesto a usted y a sus fraudes electorales", agregó, y anticipó que la cancillería salvadoreña enviará la propuesta formal a Venezuela.
Bukele citó que el canje debe incluir a Rafael Tudares, yerno del líder opositor Edmundo González; la activista de derechos humanos Rocío San Miguel; los opositores asilados en la embajada de Argentina en Caracas, y unos 50 ciudadanos detenidos de otras nacionalidades.
Maduro, que hasta ahora no ha reaccionado a la propuesta del gobernante salvadoreño, sostiene que los venezolanos fueron "secuestrados" y su gobierno contrató un abogado para representarlos en El Salvador.