SANTIAGO.- Luego de que el ministro del Interior y Seguridad Pública (s), Mahmud Aleuy, anunciara que se interpondrá una querella en contra de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) por el delito de asociación ilícita y el ataque incendiario a la empresa de transportes Bitumix que fue reivindicado por la agrupación, su líder Héctor Llaitul, aseguró que tiene disposición al diálogo con el Ejecutivo.
"Si hay alguien que no está disponible para el diálogo, es el Estado. Estamos disponibles, pero para un diálogo sustantivo que tenga que ver con aspectos fundamentales de nuestras reivindicaciones, que tienen que ver con territorio y autonomía para nuestra nación mapuche", afirmó a
El Mercurio.
Llaitul añadió que el diálogo no se debe sentar "sobre la base de la dominación, opresión y discriminación hacia nuestra gente".
El líder de la CAM -organización que se ha adjudicado ataques incendiarios contra forestales y agricultores desde 1997- hizo estas declaraciones luego de asistir al juicio oral que se desarrolla en Valdivia contra Patricio Antiago, integrante de una comunidad mapuche de Lanco detenido el año pasado, a quien se le imputan los delitos de porte y tenencia ilegal de municiones y de elementos destinados a cometer el delito de incendio.
Sobre esto, Llaitul afirmó que aquí "se refleja una arista más de la persecución a destacados dirigentes o militantes de la causa mapuche".
En esa línea, Llaitul señaló que el informe de la ONU -dado a conocer esta semana- grafica la situación que hay en esta parte del país, "en donde nosotros no tenemos justicia ni hay un avance sustantivo respecto de nuestros derechos".
Además, tras ser consultado por las últimas acciones de violencia que se ha adjudicado la CAM, Llaitul suspendió la entrevista y precisó "dejémoslo hasta aquí".
Desde abril de 2015 el líder de la CAM se encuentra en libertad condicional por buen comportamiento, luego de ser condenado en 2009 a 14 años de cárcel por el ataque al fiscal Mario Elgueta.
Proceso judicial
El proceso contra Patricio Antiago es debido a que en abril de 2016 habría escapado de la policía durante un patrullaje preventivo de carabineros, y al huir habría soltado la mochila que llevaba, en donde se hallaron 44 municiones de diverso calibre (escopeta y pistola), además de guantes, un machete y dos botellas con bencina.
El fiscal del caso, Alejandro Ríos, dijo que para validar la acusación, el Ministerio Público presentará 10 testigos y 12 peritos, en un juicio oral que se extenderá hasta hoy.
En tanto, la defensora penal mapuche Patricia Cuevas dijo que hay vicios de ilegalidad en este procedimiento, sumado a otras infracciones de garantías fundamentales. "Por tanto, pediremos la absolución, porque mi representado desconoce los hechos", afirmó.