Christian Zúñiga, El Mercurio
SANTIAGO.- Ya es la segunda vez en pocas semanas que un guardia de seguridad de Metro y un usuario se enfrentan. y provocan la violenta reacción de los testigos del hecho.
En abril de este año, las redes sociales viralizaron el caso de una joven universitaria que había sido esposada por dos horas en la estación Santa Isabel, por intentar pasar por una puerta que no estaba habilitada.
Ayer, el servicio en la estación Tobalaba se vio interrumpido a las 19:30 horas producto del caos que generaron varios usuarios que querían agredir a un guardia de seguridad, que supuestamente había golpeado a un joven de 15 años por no pagar su pasaje.
Metro aseguró, sin embargo, que el vigilante nunca agredió al adolescente y que fue él quien sí golpeó al personal.
Tras esta situación, el gerente general de Metro, Rubén Alvarado, explicó cuál es el protocolo a seguir para los guardias de seguridad ante un evasor.
Cuando un vigilante descubre a alguien intentando pasar sin pagar, "invitamos a la persona a que finalmente pague su pasaje y en caso de que haya alguna resistencia a ello, que se retire".
Si éste no sólo se rehúsa a pagar, sino que además reacciona con violencia, la persona será retenida por los guardias, "para lo cual nuestros vigilantes están autorizados, para que finalmente sea entregado a Carabineros".
Alvarado enfatizó que "nosotros no provocamos que la gente reciba golpes, nosotros ocupamos técnicas para reducir a las personas".
"Las cifras de evasión en el Metro en general son bastante bajas, menores al 1%, la mayoría de nuestros pasajeros tienen un comportamiento ejemplar, eso es lo que nosotros queremos que finalmente sea general", manifestó.
