SANTIAGO.- El hecho ocurrido el domingo en el casino Sun Monticello de San Francisco de Mostazal, región de O’Higgins, en que el veterinario Osvaldo Campos asesinó a tiros a dos empleados y dejó heridos a otras cuatro personas, causó profunda preocupación en este gremio.
Trascendió que algunas de las empresas del rubro ya están tomando medidas para evitar que se repitan episodios como éste y empezaron a apurar los procesos, a fin de tener la seguridad necesaria tanto para sus trabajadores como para los apostadores.
Ese es el caso de la cadena de casinos Marina del Sol –que posee locales en Calama, Talcahuano, Chillán y Osorno-, que ya había ordenado una partida de detectores de metales antes del incidente protagonizado por Campos.
Así, la entidad se convirtió en la primera en solicitar este tipo de elementos de seguridad al extranjero.
Según informaron desde la empresa a Emol, los detectores llegarán dentro de las próximas dos semanas y serán instalados en los ingresos de cada uno de sus locales y evitar así el ingreso de armas.
Sus directivos en tanto, viajaron desde la región del Biobío a Santiago para participar de la reunión con la Asociación Chilena de Casinos de Juegos, que ellos mismos pidieron ayer –también a la Superintendencia de Casinos de Juego-, luego de los trágicos hechos ocurridos el domingo en Mostazal.
Según se informó, la cita será a las 11:00 horas y de acuerdo al comunicado emanado de la propia entidad, la idea es “buscar en forma conjunta soluciones que nos ayuden a mejorar la seguridad de nuestros colaboradores y clientes, y que permitan que nunca más vuelva a ocurrir un hecho tan lamentable como éste”.
En tanto, el casino Sun Monticello, continuará cerrado por orden de la Intendencia de O’Higgins hasta que sean tomadas todas las medidas de seguridad. Cuando abran, los guardias usarán detectores de metal portátiles en cada acceso.