SANTIAGO.- Cuando la abstención electoral es un factor que preocupa a nivel nacional con miras a las próximas elecciones presidenciales, un fenómeno similar se aprecia a nivel universitario, donde se ha observado una baja en la participación de los alumnos en las elecciones de algunas federaciones estudiantiles.
El caso de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), mientras en 2013 votó el 45,72% del padrón, la cifra ha ido disminuyendo y en la última elección (de 2016) sólo sufragó el 40,3%, alcanzado apenas el quórum requerido para que ésta sea válida (40%).
Allí se reconoce que, desde el año pasado, hay un cierto temor a que no se alcance el quórum exigido para validar la elección. De hecho, en esa ocasión se establecieron tres días de votación –cuando usualmente eran dos– para que votara la mayor cantidad posible de estudiantes.
En la Universidad Católica este año también se registró una baja en el número de votantes en la elección de la federación (FEUC), que se realizó la semana pasada. Según datos que proporcionó "El PUClítico" a Emol, en 2015 votó el 61,75% y en 2016 el 62,99% (en primera vuelta). Mientras que este año la cifra bajó a 54,25% en esa misma instancia.
El director de ese medio estudiantil, Tomás Suárez, atribuye esta baja de votantes a que este año por primera vez no se presentó la lista "Crecer" –de izquierda–, por lo que "hubo un sector, el electorado de izquierda más dura, que no estuvo representado, entonces no fue a votar". De hecho, dice que donde más bajó la participación fue en las carreras que votan más por la izquierda, mientras que en las más tradicionales de derecha y de centro "se mantuvo bastante alta".
De todas formas, afirma que la participación estudiantil en la UC suele ser elevada y que "nunca ha habido problemas para alcanzar el quórum". Incluso este año, en que el número de votantes bajó, de todas formas estuvo varios puntos por sobre el quórum, que en la UC es de 50%.
"Desinterés y apatía" de las nuevas generaciones de estudiantes
En tanto, en la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (Feusach), su presidente, Patricio Medina, asegura a Emol que "el nivel de participación no ha variado" en los últimos años, sino que "se ha mantenido entre un 35% y un 40% del padrón, similar a la participación que hay a nivel nacional con el voto voluntario" y remarca que "todas las federaciones han tenido el quórum", que es del 35% en esa casa de estudios.
No obstante, reconoce que "sí ha disminuido la participación de los estudiantes en las asambleas y la recepción de los temas". "Hay un desinterés, una apatía, eso es lo más grave; en las generaciones de nosotros, del 2011, no era así, había un sentido de que importa lo que pase porque le afecta al otro, y hoy día eso no pasa, y es súper preocupante (...) Puede ser un síntoma más sociológico, de las nuevas generaciones que entraron a la universidad desde el 2015", señala.
"Hay un desinterés, una apatía (...) en las generaciones de nosotros no era así, había un sentido de que importa lo que pase porque le afecta al otro, y hoy día eso no pasa, y es súper preocupante. Puede ser un síntoma más sociológico, de las nuevas generaciones que entraron a la universidad desde el 2015"
Patricio Medina, presidente Feusach
A eso se suma que "estar manteniendo un movimiento estudiantil tanto tiempo es difícil; cuesta mantenerlo arriba y que los estudiantes se sientan con ganas de participar; hoy día cuesta movilizar a la gente en las asambleas y discusiones".
También atribuye esto, en parte, a que hay "una especie de conformismo (de los estudiantes) con algunas reformas" del Gobierno, que apuntan a las demandas del movimiento estudiantil, como la gratuidad. "Las propuestas del Gobierno vienen un poco a cooptar las demandas, no siendo una solución para éstas. La gratuidad no se cumplió como se prometió, hay cosas que se confunden... Eso los estudiantes quizás no lo entienden en la práctica, pero igual se conforman", señala.
Dice que otro factor que pudo influir son las "movilizaciones anteriores, que quizás fueron excesivas", como una que duró siete meses en la Usach y "no hubo un resultado". "Entonces los estudiantes se preguntan por qué movilizarse, si no ganamos nada". También menciona a algunas marchas "violentas", como donde se destruyó el Cristo de la Gratitud Nacional. "Todas esas cosas generaron que la gente se alejara, porque ven la posibilidad de que se desbande", afirma.
Si bien hasta ahora no han bajado los votantes en la elección de la Feusach, eso podría cambiar este año, ya que sólo se presentarán dos listas –del Frente Amplio y la NM– y no habrá una lista de ultra izquierda, como años anteriores. Medina dice que "está el riesgo de no tener quórum, (porque) si hay menos listas la gente de una tendencia no va a ir, en este caso la ultra no va a ir a votar. Probablemente se logre igual el quórum, pero va a ser mucho más difícil".
Federaciones acéfalas en la Región del Biobío
Este fenómeno se replica en las universidades más importantes de la Región del Biobío, donde la situación sería incluso más crítica. Según publica diario "El Sur", allí la participación ha mermado considerablemente. Por ejemplo, en la Universidad de Concepción en las elecciones de 2011 votaron 4.562 alumnos y este año sólo 1.575. Y en la Universidad Católica de la Santísima Concepción bajó de 2.440 a 1.684 en el mismo periodo.
En esta última, en 2015 la federación quedó además acéfala debido a la falta de quórum en la elección. Sólo en 2016 pudo asumir una nueva directiva luego que se modificaron los estatutos, rebajando el quorum al 20% del padrón. El presidente de esa federación en 2010 y 2011, Carlos Ruminot, comenta a ese medio que esto ocurre debido a una desafección a la representación a nivel estudiantil, ya que "muchas demandas, como la gratuidad, ya han sido acogidas".
Algo similar ocurre actualmente en la Universidad del Bío-Bío, en el campus Concepción, donde no hay federación luego de que el último proceso fuera invalidado por falta de quórum. Claudio Briceño, quien fue presidente en 2011, lamenta la baja participación y afirma que "es triste ver que no existe la representación que se tuvo antes".
Mientras que Javier Miranda, presidente de la federación de la U. de Concepción en 2013, cree que "la política, incluso la estudiantil, se encuentra desprestigiada", y afirma que "las mismas federaciones deben ser capaces de llegar al estudiante común y corriente, y volver a utilizar los espacios de forma inclusiva, con responsabilidad, para aumentar la participación".