SANTIAGO.- Con la intención de completar finalmente el anillo que rodea al centro de Santiago, el Gobierno puso en marcha el proyecto de la autopista Américo Vespucio Oriente, que consta de dos tramos (AVO I y AVO II) que pasará de forma subterránea por seis comunas de la capital.
Mientras que la primera etapa del megaproyecto ya tiene aprobada su Resolución de Calificación Ambiental (RCA), dejándola lista para iniciar sus obras durante este mes, la segunda etapa se encuentra iniciando ese proceso tras su adjudicación por parte del Grupo Costanera.
Pero a pesar de el Gobierno tuvo múltiples reuniones con los alcaldes de las comunas que se verán beneficiadas por el proyecto -y afectadas por la construcción-, los ediles de Vitacura y La Reina han mostrado sus reparos frente algunos aspectos del diseño de las obras que fueron modificados sin consulta previa.
Vitacura vs. AVO I
El pasado 25 de octubre el primer tramo del proyecto, AVO I (El Salto-Príncipe de Gales), obtuvo la aprobación de su RCA, permitiendo que sus obras al fin pudieran iniciarse durante este mismo mes, tras años de espera.
Sin embargo, el acalde de Vitacura, Raúl Torrealba, anunció a El Mercurio que se opondrá al inicio de las faenas luego de que se conociera que el Ministerio de Transportes y la Intendencia Metropolitana realizaron modificaciones al diseño acordado con los municipios.
Los cambios incluyen una pista adicional de buses y dos ciclovías unidireccionales, lo que amenaza con quitar 15,4 hectáreas de las 18,4 que tiene actualmente el parque de Vespucio ubicado en el bandejón central.
"Esperamos que esto se rectifique. Si se pasa por encima de lo acordado, queremos tomar todas las acciones legales, en tribunales ambientales y civiles. He recibido un apoyo brutal de los vecinos. Cuando los proyectos se hacen en contra de las comunidades, finalmente terminan por no hacerse", sentenció el edil.
Pero los problemas siguen. Los cambios, que fueron aprobados por la Comisión de Evaluación Ambiental, implican una alteración del contrato adjudicado a la empresa concesionaria OHL-Sacyr. Por el contrario, si se vuelve al diseño original, se requeriría nuevamente una evaluación ambiental.
La Reina vs. AVO I
Actualmente, AVO I también tiene una disputa pendiente con la comuna de La Reina. Su alcalde, José Manuel Palacios, planteó que las obras de mitigación comprometidas en la licitación no se consideraron en el nuevo diseño aprobado.
Según el edil, en un principio estaba pensada una extensión de la calle Sánchez Fontecilla por un monto de $5 mil millones, pero que contemplaba la expropiación de la mitad de los terrenos del Colegio Terranova, ubicado en la calle La Cañada.
Esto generó el rechazo de los vecinos, por lo que, según expone La Tercera, el Ministerio de Obras Públicas tuvo reuniones con el municipio, quien aseguró que no era necesario alargar Sánchez Fontecilla. No obstante, se acordó realizar una mesa trabajo para determinar otras obras de mitigación en los que se pudiera utilizar esa inversión.
Sin embargo, tras conocerse el proyecto final aprobado por la Comisión de Evaluación Ambiental, no se consideran ninguna de esas dos alternativas.
"Esto para nosotros es bastante grave, porque significa que el MOP de forma unilateral está decidiendo no realizar estas obras, lo que significaría regalarle al consorcio esos recursos", manifestó Palacios.