En la foto el senador Latorre (RD-miembro del comité PS) quien llamó a sus pares socialistas a rechazar a Vivanco. De pie la senadora Allende quien anunció inicialmente su voto en contra, y en un costado el senador del PPD, Ricardo Lagos Weber, que se abstuvo acusando al partido de Elizalde (sentado) de "quebrar" el acuerdo.
Jonathan Mancilla, El Mercurio
SANTIAGO.- "Así es imposible generar confianzas, necesarias para la actuación conjunta". Así de tajante fue la senadora Carolina Goic (DC) al analizar la decisión del Partido Socialista de no respetar el acuerdo que tenía la oposición con el Gobierno y votaron en contra -solo el senador José Miguel Insulza se abstuvo- de la nominación de Ángela Vivanco como nueva ministra de la Corte Suprema.
La determinación se tomó ayer pocas horas antes de la votación en el almuerzo de los senadores liderados por su presidente, senador
Álvaro Elizalde, quien antes de llegar ahí había sostenido conversaciones con varios de sus diputados y representantes del
Frente Amplio, quienes le hicieron ver su rechazo a la abogada por su postura opuesta a la agenda de género.
Por lo que, tal como lo manifestó la ex candidata presidencial de la falage, esta opción no solo sumó tensión a la relación ya fracturada que mantiene el
PS con el Gobierno, sino que abrió un nuevo foco con la
ex Nueva Mayoría, específicamente con el
PPD y la DC.
El senador PPD, Guido Girardi (votó a favor) habló de "incumplimiento" a los socialistas por no haber respetado lo sellado hace 15 días y su par Ricardo Lagos Weber (se abstuvo), los acusó de "quebrarlo" y por ende con su acción "se cayó" la negociación.
De esa colectividad la única que votó en contra fue la senadora Adriana Muñoz, quien eso sí lo había adelantado desde que se conoció que la abogada sería candidata a integrar el máximo tribunal, pese a eso en conversación con Emol reconoció que también la "sorprendió el giro del Partido Socialista".
"Todavía no nos hemos sentado a conversar sobre qué efectos podría traer esto en las futuras negociaciones de cargos", dijo Muñoz quien supone además que la postura del PS podría no afectar a toda la relación de la oposición con el Gobierno en futuras designaciones aunque reconoce que "es muy pronto para deducir consecuencias".
"
Hay malestar en la DC y el PPD porque a última hora hacer un giro tan abrupto es complejo. Entonces yo creo que eso va a traer un necesario debate al interior de los partidos de oposición en el Senado.", afirmó la senadora PPD.
Este disgusto de hecho fue expresado hoy por el propio
presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, a Elizalde. Ya que justo tenían agendada para esta mañana una reunión entre ambas directivas ya que el ex diputado asumió hace pocos días el cargo, sin embargo, el tema de Vivanco se volvió el eje del encuentro. Incluso según ha trascendido,
algunos de los senadores falangistas comentaron que la reunión debió haber sido suspendida tras lo ocurrido ayer en el Congreso.
"Estamos en un proceso en el que tenemos que ir reconstruyendo confianzas, lo hemos conversado con mucha franqueza con el presidente del Partido Socialista, le hemos hecho ver nuestra opinión, le hemos transmitido también la molestia de nuestros senadores con quienes hemos hablado, y en eso, por lo menos la DC tiene una tradición que vamos a cumplir nuestros acuerdos y creo que esto también es por lo menos una base que permite también ir construyendo confianzas", contó Chahín tras la cita.
El timonel de la DC reconoció en que efectivamente "se recienten las confianzas", pero dijo estar "tranquilo" porque sus parlamentarios "votaron en consecuencia cumpliendo el acuerdo".
Por su parte Elizalde prefirió no profundizar al respecto aludiendo a que se debía respetar la visita que él realizada a la sede demócrata cristiana, pero deslizó que no existió un acuerdo cerrado con el Gobierno. "No había nombres" sostuvo, afirmando que solo hubo "negociaciones".
La evaluación PS
En tanto en el socialismo ya han realizado los primeros análisis y reconocen que internamente la situación fue evaluada como una "fortaleza" del partido, ya que los militantes en su mayoría se oponían a Vivanco y han manifestado "con honestidad" que no solo conversan con la DC, sino que también se abren a generar lazos con el Frente Amplio, en donde el nombre de la abogada era absolutamente rechazado.
Mientras que tampoco se cataloga la fractura con el PPD y la DC como algo catastrófico, ya que justamente se encuentran en pleno proceso de rearme como oposición.
La postura socialista eso sí, no logró el absoluto consenso internamente, de hecho Insulza calificó como "fuerte" la postura del rechazo explicando su abstención y aseguró que su partido terminó "absolutamente" accediendo a la presión "de los diputados y otros sectores".
"Entendí, y así me lo informaron las personas más responsable de esto en la bancada, que había un acuerdo con otros partido, el PPD y la DC, de votar a favor. No conozco a la señora Vivanco, no tengo relación con ella, pero so si estábamos de acuerdo en votar a favor...., entonces, me pareció un poco fuerte aparecer votando en contra. Entonces me abstuve, otra cosa era darse vuelta y terminar votando de esa manera", analizó.