A fines de octubre Precht declaró como imputado en la PDI.
Luciano Aernishaslins, El Mercurio
SANTIAGO.- A través de un comunicado el Arzobispado de Santiago dio a conocer que el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, cardenal Luis F. Ladaria, S.J., los notificó este sábado de la decisión del Papa Francisco de decretar la expulsión del sacerdote Cristián Precht.
"La dimisión del estado clerical 'ex officio et pro bono Ecclesiae' y la dispensa de todas las obligaciones unidas a la sagrada ordenación, del Rev. Cristián Precht Bañados. El mismo decreto establece que el obispo comunique a la brevedad la nueva situación canónica del afectado al pueblo de Dios", informaron.
El religioso es indagado por denuncias de abusos sexuales a menores en el marco del caso Maristas.
A inicios de septiembre la Corte Suprema determinó acoger el recurso de amparo presentado por la defensa de Precht en contra del Arzobispado de Santiago. Lo anterior, debido a las medidas cautelares que le impuso el organismo al presbítero.
Se le había suspendido realizar actos propios del ministerio sacerdotal y residir en Santiago mientras durase la investigación canónica en su contra.
Por otro lado, el ex vicario de la solidaridad declaró el 30 de agosto en calidad de imputado ante la Brigada de Homicidios de la PDI en Ñuñoa por eventual conocimiento de presuntos abusos sexuales cometidos por el ex capellán de la FACh Pedro Quiroz.
En ese entonces el fiscal jefe de Delitos Sexuales y Violencia Familiar, Guillermo Adasme, explicó: "Se trata de una causa seguida por la acusación del imputado Pedro Quiroz y en ese contexto don Cristián Precht concurrió a declarar en calidad de imputado, respecto de su conocimiento del hecho, a propósito del cargo que ejerció en el periodo del año 2000 a 2009, como vicario de la zona sur".
La semana pasada, una organización formada por los autodenominados "sobrevivientes" de abusos perpetrados por religiosos, dentro de colegios administrados por Maristas, informaron que la investigación canónica aceptó sus denuncias como "válidas".
El denominado Caso Marista se conoció en 2017 cuando la congregación admitió la existencia de abusos por parte del religioso Abel Pérez, siete años después que el propio sacerdote reconociera su culpabilidad.
Pérez fue expulsado recientemente por el Vaticano.