SANTIAGO.- Para esta mañana estaban programados los alegatos de la apelación de la demanda civil que llevan adelante contra el Arzobispado de Santiago las víctimas del ex párroco de El Bosque Fernando Karadima, y que fue rechazada en primera instancia hace más de un año y medio. Sin embargo, fueron suspendidos.
Ante esto, el abogado de los denunciantes, Juan Pablo Hermosilla, aseguró: "Fue una decepción toda esta demora, esta causa debió haberse visto hace muchos meses, aún no entendemos por qué se demora tanto (...) Estamos preparados para enfrentar este tema desde hace mucho tiempo y esperamos que el Estado chileno pueda resolverlo y zanjarlo de una vez por todas".
Hasta el Palacio de Tribunales también llegaron José Andrés Murillo y James Hamilton, dos de las víctimas del cura que fue condenado por el Vaticano a una vida de oración y penitencia.
Ante la suspensión, el primero sostuvo: "Lo que nosotros buscamos es que este juicio, ojalá, sea histórico, porque va a mostrar qué es lo que opina el Estado (...) Hay un cambio de fondo en la cultura, en la sociedad y eso probablemente va a ir empujando a la Iglesia".
Más tajante fue Hamilton, quien consultado a cómo podría incidir el hecho que el Pontífice reconociera la existencia de encubrimiento en el país en la tramitación de la causa, indicó que "lo importante no es lo que opine el Papa o la Iglesia, sino que somos un pueblo soberano".
En esa línea, continuó: "Acabamos de ver cómo se lucho por la independencia del Poder Judicial. Yo creo que ese mismo Poder Judicial es el que hoy día nos tiene que demostrar también su independencia de la Iglesia, no solo del resto de los poderes del Estado".
"Creo que la Iglesia tiene que tener un sistema de justicia, de encierro, para hacerse cargo de sus sacerdotes abusadores. Me preocupan estos personajes sueltos en la calle"
James Hamilton
Y remató: "Lo que se va a ver acá es un juicio en que la historia nos dirá si el Estado de Chile, sus jueces, estuvieron a favor del abuso, la corrupción, y subyugado al poder de la Iglesia o ha sido un Poder que hoy es autónomo y hace la pega que le corresponde que es juzgar. Yo tengo la confianza que así va a ser".
En la demanda, rechaza por falta de pruebas, se pide una indemnización de $450 millones por la responsabilidad de la Iglesia en el encubrimiento de los abusos de Karadima.
"Depredadores muy peligrosos"
Además, Hamilton se refirió a los cuestionamientos que han surgido sobre por qué el Papa Francisco no expulsó del sacerdocio a Karadima y sí lo hizo con el ex vicario de la Solidaridad, Cristián Precht.
"Cuando los sacerdotes son expulsados del sacerdocio, salen de la órbita de la Iglesia, caen a la civil y se van a transformar en depredadores muy peligrosos", partió indicando.
Y añadió: "Creo que la Iglesia tiene que tener un sistema de justicia, de encierro, para hacerse cargo de sus sacerdotes abusadores. Me preocupan estos personajes sueltos en la calle, así que es un tema que hay que tratar urgente, porque se ha visto que cuando quedan libres y fuera de la Iglesia, como se ha visto en Australia, vuelven a actuar de manera peligrosa para la sociedad y los niños".
2013año en que se interpuso la demanda
Y concluyó: "Cuando están bajo la tutela de la Iglesia, juzgados y de una manera aislados, podrían ser menos peligrosos".
En el caso del ex párroco de la iglesia El Bosque, éste se encuentra en un hogar de Lo Barnechea a cargo de la Congregación Santa Teresa Jornet.