TALCAHUANO.- Fueron en total 15 los colegios afectados por la tromba marina que azotó el viernes a las comuna de
Talcahuano y Concepción. Producto de los daños,
la Secretaría General Ministerial (Seremi) de Salud del Biobío informó esta tarde que cinco establecimientos mantendrán sus clases suspendidas, tres de ellos al menos por este lunes, mientras que los dos mayormente perjudicados no tendrán actividad durante toda la semana.
Se trata del
Liceo de Niñas y el colegio Gran Bretaña, ambos municipales de Concepción, sumado los colegios de Talcahuano Santa Bernardita, San Cristóbal y Huertos familiares, los dos primeros subvencionados y el tercero municipal.
La suspensión, según precisaron desde la Seremi, será sin recuperación de clases, "lo que significa que no se pierde subvención y que profesores deben ajustar calendario de forma interna para no perder contenido".
Además, el organismo detalló que los dos recintos con mayores daños estructurales son el Liceo de Niñas (600 alumnas), y Huertos Familiares (160 estudiantes), los que sufrieron severas afectaciones, principalmente en sus vidrios y techumbres.
De hecho, los alumnos de ambos recintos
deberán ser reubicados en otros establecimientos, y es que sus condiciones actuales los hacen "inhabitables".
Así lo aseguró a
Emol el Seremi de Educación del Biobío, Fernando Peña. "Huertos Familiares y el Liceo de Niñas están inhabitables, ahí estamos trabajando en el plan de reubicación. En el caso del colegio Huertos Familiares ya hay por el sostenedor un plan más avanzado. Lo más probable es que se reubique en la escuela Villa Independencia, ahí mismo en la comuna, para que obviamente se realicen las labores de limpieza y también de reconstrucción".
"Y en el caso del Liceo de Niñas, que también está inhabitable, ahí hay un daño considerable y sobre todo de afectación mayor en la techumbre, lo que obviamente va a generar filtraciones y probablemente más daños en la infraestructura.
Estamos trabajando también con el alcalde ahí un plan de reubicación de las alumnas el que va a ser informado mañana", añadió.
Seguido de ello, recalcó, "tanto en el Liceo de Niñas como en Huertos Familiares los alumnos van a tener que ser reubicados y las clases (en los dos) van a estar suspendidas toda esta semana, que es el tiempo que básicamente nos hemos tomado para poder reubicar a los alumnos", aclarando que mañana se desplegarán los equipos de infraestructura del ministerio para hacer un diagnóstico del porcentaje de afectación de los establecimientos y así determinar el nivel de intervención que requieren.
Mientras que en los otros tres establecimientos, explicó la autoridad, "los alumnos no van a ser reubicados, porque son daños menores y lo que se calcula es que con los arreglos que se realicen durante estos días los alumnos puedan volver a retomar las actividades lo antes posible", agregando que
la suspensión de clases en dichos recintos podría extenderse más allá del lunes. "Si es que se descubriese que los daños en la cubierta y en la techumbre compromete mayor parte de la infraestructura, se tendrá que evaluar", comentó.
"Nos impresiona que no haya heridos
Si bien tanto el el Liceo de Niñas como el colegio Huertos Familiares fueron los mayor afectados por la tromba marina, este último se llevó la peor parte, y es que el fenómeno prácticamente arrasó con el establecimiento que alberga a 160 alumnos de entre prekinder y octavo básico.
Tal fue el impacto, que la
directora, Lorena Sanhueza, asegura que le impresiona que no hayan habido personas heridas de gravedad al interior del colegio.
"En medio de todos estos destrozos nos impresiona que no haya ningún herido. Aquí en medio del patio teníamos motores de camiones, colchones, restos de palos, neumáticos que volaron de otras partes, de todo. Afortunadamente los niños no estaban en el patio, porque de haber estado en recreo hubiéramos contado otra historia", sostuvo a Emol, mientras recorría lo que quedaba del establecimiento que lidera ubicado en el sector de Jaime Repullo.
En ese sentido, destacó el actuar de las profesoras para evacuar a los menores. "Se utilizó principalmente todo el programa de seguridad respecto a sismos, pero no pudimos utilizar el patio como zona segura, porque era la zona más insegura de todas.
Los pequeñitos estaban muy asustados y nos refugiamos en la sala de profesores y en la oficina de dirección, que eran los lugares más seguros en ese minuto".Para evacuar, continuó, "trasladamos a los niños por las orillas de las paredes, removiendo escombros, y pasamos a todos los pequeños que iban muy asustados, pero tratamos de hacerlo lo mejor posible. Gracias a Dios las profesoras reaccionaron de la mejor forma, y segundo y más importante de todo, es que los niños no tuvieron daños".
Y respecto a la reubicación de los alumnos, Sanhueza expuso que "en una semana nosotros, a nivel de dirección y cuerpo docente en general, podríamos organizarnos para trasladar nuestras cosas donde nos designen las autoridades, para que los niños continúen con su proceso escolar (...). Ahora es cuando debemos dar mucha contención tanto a nuestros niños como a sus familias".
