Son cientos los ciudadanos extranjeros, principalmente venezolanos, que se encuentran hace algunos días impedidos de movilizarse en el
a la espera de ingresar al país. El paso está emplazado en la Región de Arica y Parinacota y une a Chile con Perú.
La mayoría buscaba entrar a Chile, pero muchos de ellos no portaban o no tenían la documentación exigida. Sin embargo, al intentar volver a Perú su ingreso fue rechazado debido a las nuevas regulaciones migratorias que entraron en vigencia el 15 de junio pasado, quedando en una suerte de limbo en dicho paso fronterizo.
La situación quedó al descubierto tras las publicaciones en redes sociales del director nacional del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), José Tomás Vicuña. "Ahora en Chacalluta hay más de 200 personas, la mayoría de Venezuela, que están varadas hace días", señaló en la tarde de ayer.
"Hay niños y niñas a la intemperie. No es Cúcuta, es Chacalluta", recalcó.
Según señaló a Emol la jefa regional del SJM en Arica, Javiera Cerda, "la situación hoy día es que las personas que salen del Perú por el complejo fronterizo Santa Rosa y quieren ingresar a Chile por el complejo fronterizo Chacalluta, han sido rechazados, sobre todo las familias con niños, porque hay una falta de documentos de permisos de partes de los papás para que puedan entrar a Chile".
La complejidad actual
Dicho eso, Cerda aclaró que el que Chile "rechace" el ingreso no es "un problema de ahora, sino que viene desde diciembre del año pasado". Asegura que la complejidad actual dice relación con que antes quienes eran rechazados retornaban a Perú, "pero desde el 15 de junio las personas venezolanas que quieran entrar a Perú tienen que hacerlo con una visa humanitaria tramitada de antes en el consulado o en su país de origen". Es decir, una vez que salen de Perú para llegar a Chacalluta ahora no se les permite regresar sin la nueva documentación requerida.
"Entonces, el tema es cómo seguimos avanzando para la acogida de estas personas que reconocemos que están en crisis", agregó, aclarando que si bien "hay muchos que han podido ingresar" a Chile, hasta ayer, "según lo que nos han informado", había entre 300 y 400 personas en Chacalluta, muchas de ellas, niños.
Más de 300migrantes esperan en Chacalluta
De todas formas, Cerda reconoce que desde que se dio a conocer el tema, "
la situación ha mejorado bastante. El gobierno regional estuvo ayer todo el día haciendo rondas, ayudando. Agradecemos que haya habido un movimiento", como la entrega de un punto de hidratación. Aunque dijo que aún "
no hemos tenido acceso a entregar alimentos. Para estar en frontera uno tiene que tener autorización, y no la hemos podido conseguir".
Respuesta del Gobierno
Al respecto, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, sostuvo que "ingresan a Chile quienes cumplan con los requisitos legales, cualquiera sea el origen y su nacionalidad", recordando la existencia de la visa especial con Venezuela llamada "visa de responsabilidad democrática", la que confiere un permiso residencial temporal en el país por plazo de un año.
"Estamos haciendo cumplir la ley y lo que corresponda lo vamos a hacer. Hemos puesto además toda la gente a disposición. Hemos reforzado los equipos migratorios y los equipos que están ahí en el control migratorio", señaló por su parte el director general de la PDI, Héctor Espinosa.
"Ingresan a Chile quienes cumplan con los requisitos legales, cualquiera sea el origen y su nacionalidad".
Andrés Chadwick
En tanto, desde la intendencia de Arica y Parinacota expusieron que se están realizando "medidas de atención" para los migrantes en Chacalluta
, disponiendo médicos, carpas para paliar el frío, buses de traslado, basureros, puntos de hidratación y evaluar la salud de los extranjeros en tránsito. Y respecto a posible ingreso de estas personas al país, la gobernación regional aclaró que para ello deben cumplir con los requisitos que correspondan.
Mientras que la gobernadora de Arica, Mirtha Arancibia, explicó a la Estrella de Arica que "los últimos días hemos percibido el notable aumento de migrantes venezolanos que han tratado de ingresar al país provenientes de Perú. Nos hemos organizado con los servicios contralores, con la intendencia y el Ministerio del Interior para poder atender la contingencia".
"Hay que comprender que el complejo es una estructura de paso, no es para que la gente se detenga o pase una mayor cantidad de tiempo", dijo, agregando que en las instalaciones no se puede brindar alimento a estas personas. "Es muy valorable lo que las organizaciones humanitarias pueden entregar, pero debe ser fuera del complejo", comentó.
Testimonios
Leydi, profesora de educación preescolar, lleva tres días en Chacalluta, tras salir hace cerca de diez de su país. "Estoy viajando con mi hijo menor que tiene un año y dos meses. Estoy huyendo de mi país, Venezuela, porque allá no tengo como mantener a mi bebé (...). Su papá nos abandonó cuando tenía dos meses de nacido mi bebé".
"Tengo una prima lejana y ella me ofreció ayuda. De hecho, ella fue la que me envió dinero para mis viáticos en todo el camino. Ella me está esperando, y acá (en el paso fronterizo) no me dejan pasar porque no tengo el permiso del papá. Yo soy su mamá, el papá no está, se fue, no existe. Por favor, necesito que me den ayuda para poder salir y llegar a mi destino", manifestó.
Y agrego: "Estamos en una situación donde no podemos tener a estos niños tan pequeños".
Otra ciudadana venezolana, enfermera de profesión, pero que no entregó su nombre, sostuvo que "tengo tres días esperando, durmiendo con mis hijas y mi abuela que es de la tercera edad sobre las maletas, en el piso. No tenemos ni siquiera cómo regresarnos, dormir en un hotel. Nada, no tenemos nada".
"Llevo tres días aquí pasando noche y día, con frío, con hambre", afirmó.