En el marco del aniversario de Evópoli, que este viernes cumplió siete años de existencia, el Presidente Sebastián Piñera brindó un extenso discurso, donde aprovechó de abordar las distintas dificultades que ha debido enfrentar durante las últimas semanas, como por ejemplo, la acusación constitucional que el jueves se llevó a cabo en su contra en la Cámara de Diputados.
Si bien el libelo se cayó y fue aprobado en su cuestión previa antes de entrar en el debate de fondo, Piñera se mostró "preocupado" y "entristecido" por la determinación de un grupo de parlamentarios de oposición de llevarlo a afrontar dicha instancia en el Parlamento.
"El odio y la violencia han reaparecido con tanta fuerza en nuestro país, y no solamente en las calles, sino que también en el Congreso Nacional, cuando vemos a algunos que creen que se sienten con el derecho de pasar por encima de todos los demás", dijo Piñera, haciendo alusión a los diputados que lo acusaron.
"Algunos creen que su voluntad tiene que imponerse siempre y a cualquier costo, en toda circunstancia. Yo creo que la gran tarea que tenemos como país es recuperar esa sana convivencia entre los chilenos, esa capacidad de pensar distinto, pero no por eso tener que odiarnos como a veces uno observa en las actitudes y las acciones de algunos", profundizó.
En ese sentido, el jefe de Estado pidió trabajar para alcanzar un país "donde podamos pensar distinto" y "donde respetemos nuestras diferencias". "Pero por sobre todo eso, creo (en un país) donde tengamos la grandeza de saber construir juntos ese futuro mejor para nuestros hijos, para nuestros nietos, y para los que vendrán", subrayó.
Estas son las primeras palabras con que Piñera se refiere a la acusación que se desarrolló ayer en la Cámara Baja, pero que en definitiva terminó por ser rechazada gracias al respaldo que recibió por parte de algunos diputados de oposición.
Renovar la política
Por otro lado, el Presidente le envió un mensaje a las bases de Evópoli, partido al que le solicitó "darle un nuevo aire a la política" de nuestro país.
"Creo que necesitamos mejorar la calidad de la política, porque todos lo sabemos o lo intuimos: en esta materia, o recuperamos la legitimidad del servicio público, el respeto por los servidores públicos, la nobleza de la política, o vamos a enfrentar tiempos muy oscuros o muy difíciles en nuestro país", afirmó.
Y precisó que "Evópoli tiene que ennoblecer la política, tiene que devolverle a la política el sitial que le corresponde en un país democrático como es Chile, y esas va a ser la tarea difícil, porque todos sabemos que, por distintas razones, se ha producido un profundo divorcio entre la política y la ciudadanía. Y eso es malo, porque cuando la política se enferma, se enferma la democracia".
Respecto a las denuncias de violaciones a los derechos humanos que reportó la ONU a través de su informe publicado este viernes, Piñera enfatizó en la importancia de que sea el Estado en encargado de resguardarlos para proteger a sus ciudadanos. Además, prometió sanciones para todos quienes se excedan en sus atribuciones.
"Los derechos humanos son anteriores al Estado, no es el Estado el que graciosamente los concede, sino que al revés, el Estado tiene la obligación de promoverlos y de defenderlos. Y por tanto, una de las preocupaciones permanentes que hemos tenido, es que en Chile el imperio de los derechos humanos se produzca siempre, en todo tiempo, en todo lugar y en toda circunstancia", acotó.