SANTIAGO.- Mientras a nivel escolar hay familias que están optando por que sus hijos realicen exámenes libres ante la incertidumbre por el coronavirus, en las universidades hay estudiantes que han decidido congelar sus carreras a raíz de la pandemia.
Si bien hasta ahora no es un fenómeno generalizado en las casas de estudio, varios planteles consultados por Emol señalan que ya registran ese tipo de casos.
"Efectivamente, este inicio de semestre estamos viendo un aumento de los casos de alumnos que solicitan congelar o que se han retirado de sus estudios. Es un hecho muy entendible, particularmente para los alumnos de primer año, que, después de una situación muy compleja para realizar la PSU, se encuentran con que no pudieron iniciar sus estudios universitarios de una manera normal", comenta el rector de la Universidad Finis Terrae, Cristian Nazer.
"Es un hecho muy entendible, particularmente para los alumnos de primer año que, después de una situación muy compleja para realizar la PSU, se encuentran con que no pudieron iniciar sus estudios universitarios de una manera normal"
Cristian Nazer, rector Universidad Finis Terrae
Afirma que están "dando facilidades para aquellas familias que se encuentran con problemas económicos, para que eso no sea un factor determinante en dejar la universidad". Sin embargo, explican que "no solo es un tema económico, sino que va mucho más allá, por la incertidumbre que esta situación genera o por las dificultades prácticas que para muchos implica tener que estudiar desde su casa, donde no necesariamente están las condiciones suficientes para que ello ocurra".
Eso también se ha observado en la Universidad Católica, donde señalan que "este semestre tuvimos un leve aumento en la cantidad de suspensiones de estudios solicitadas". Así, mientras el año pasado el 1,7% de los alumnos matriculados había solicitado suspender sus estudios, "en este complejo semestre, la cifra alcanzó al 3%". Desde la universidad comentan que, dentro de todo, "se trata de una cifra acotada, inferior a la que anticipábamos, considerando además que extendimos el plazo para dicha solicitud".
"La carga académica y mental es mayor"
La presidenta interina de la Federación de Estudiantes de la UC (FEUC), Amaranta Valdivieso, dice que, además de quienes ya tomaron la decisión de congelar, "existen varios estudiantes que han manifestado estar evaluando suspender su semestre a causa de las dificultades que ha presentado la pandemia".
Entre las razones que los impulsan, menciona el "cambio en el estilo de vida" por la emergencia sanitaria, sumado al desafío de tener clases online, "que estamos aprendiendo en la marcha cómo sobrellevarlo". En ese sentido, afirma que "un punto importante es el deterioro de la salud mental" de los estudiantes, ya que en el nuevo contexto "la carga académica y mental a la que se enfrentan nuestros compañeros resulta mayor".
Al respecto, menciona que "las clases presenciales tienen un diseño que no es el mismo que podemos abordar desde el método online, ya no está a disposición la pizarra, también ocurre que al estar todo el día metido en el computador, los estudiantes –y también los docentes– ven afectada su salud visual, y muchos manifiestan terminar con dolores de cabeza y cansancio".
"(Congelar los estudios) es una decisión difícil, que conlleva repercusiones importantes, como el tiempo que se demorarán en finalizar sus carreras o la sensación de que van a perder el ritmo y la sintonía con sus compañeros"
Amaranta Valdivieso, presidenta FEUC
"Estar una hora y media en el computador es muy distinto a estar en una clase donde el diálogo es mucho más sencillo,
por medios online se complica quién habla primero, y eso impacta en el proceso de aprendizaje, especialmente para quienes no cuentan con acceso a aparatos eléctricos, internet estable y a espacios físicos", señala la dirigenta.
Eso sumado al factor económico, ya que "las familias de muchos estudiantes se ven enfrentadas a momentos difíciles, frente a los que tienen que priorizar otros gastos".
La estudiante dice que les preocupa la opción que están tomando sus compañeros, pues "conlleva repercusiones importantes, como el tiempo que se demorarán en finalizar sus carreras o la sensación de que van a perder el ritmo y la sintonía con sus compañeros". Por eso, dice que debe ser "una decisión que no tomen solos", sino que cuenten con apoyo y orientación de la universidad, ya que "también existen casos en que la solución podría ser una de menor impacto".
"Decisiones prematuras"
En tanto, en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE) indican que hasta la fecha hay once casos de alumnos que han realizado el trámite para postergar sus estudios (congelar) y tres que han renunciado.
"Esto empezó a ocurrir de forma casi inmediata cuando se decreta la cuarentena. Se nota un antes y un después (...) La mayoría dice que es por la pandemia, que prefieren tener un año de educación presencial, no online"
Domingo Pavez, jefe de Admisión UMCE
El jefe de Admisión y Registro Curricular, Domingo Pavez, comenta que la cifra "puede ser similar al año pasado", pero que "nos llama la atención lo prematuro de estas decisiones". "Generalmente esto ocurre más adelante, se prorratean por el año, pero esta vez esto empezó a ocurrir de forma casi inmediata cuando se decreta la cuarentena. Se nota un antes y un después", señala.
Respecto de las razones que han dado los alumnos para tomar esa decisión, dice que "la mayoría dice directamente que es por la pandemia, que prefieren tener un año de educación presencial, no online, otros que van a irse del país debido a esto, hay diferentes situaciones".
Menciona que la decisión la han tomado alumnos de distintos niveles, incluyendo de primer año, y que algunos piden congelar solo el semestre en curso, otros todo el año académico, y hay situaciones de estudiantes que solicitaron congelar también el 2021.
El encargado de admisión señala que, en todos los casos, se busca resguardar que los jóvenes conserven sus beneficios económicos cuando llegue el momento de que retomen sus estudios.
En la Universidad de la Frontera, en tanto, la vicerrectora de pregrado, Pamela Ibarra, señala que no han observado un aumento de estudiantes que haya solicitado postergar sus estudios. Sin embargo, indica que éstos "aún están a tiempo de solicitar postergar o retiro por este semestre", por lo que "estamos monitoreando de forma periódica esta situación y, desde el primer momento, se han tomado medidas enfocadas a apoyar a los estudiantes y sus familias a enfrentar esta situación, desde flexibilizar el pago de aranceles, hasta otras medidas para apoyar la modalidad en que se desarrollará este semestre".
Mientras que en la UC del Maule señalan que hasta la fecha 124 estudiantes han renunciado a la institución y 179 han suspendido por uno o dos semestres. Hacen ver que esto significa para la institución una disminución de aranceles promedio de al menos $677 millones.
Otras universidades que también fueron consultadas por Emol indicaron que no registran esa situación, como la Universidad de Chile, Universidad de Santiago, UTEM, Universidad de O'Higgins, Universidad de Aysén y UC Silva Henríquez; otras, como la U. de Concepción y la U. de Talca, señalaron que aún están en proceso, por lo que los datos no serían concluyentes; y hubo otros planteles que prefirieron no entregar esa información.
Otro antecedentes en este contexto es un informe que entregó la semana pasada el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), que indica que hasta la fecha han recibido cerca de 1.100 reclamos hacia universidades relacionados con la emergencia sanitaria. La entidad detalla que "los reclamos en educación apuntan principalmente a congelamientos o rebajas en los aranceles" considerando que los alumnos no están asistiendo a clases presenciales.
