El ministro de Educación, Raúl Figueroa, dice que es consciente de esta eventual problemática.
El Mercurio (archivo)
En una de las múltiples consecuencias que el coronavirus está generando en el país se encuentra la mayor dificultad que algunos niños y jóvenes están teniendo a la hora de acceder a la educación. De hecho, organismos como la Unesco han advertido que la pandemia y la crisis económica que trajo podrían generar que muchos niños y adolescentes dejen de ir al colegio, situación de la que son conscientes en el Ministerio de Educación. "Lamentablemente, todo indica que la crisis sanitaria puede traducirse en un efecto muy negativo para el sistema escolar, que es el incremento de la deserción", plantea el titular de la cartera, Raúl Figueroa, por lo que insta a los establecimientos a mantener contacto con sus estudiantes.
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