Solamente un 34% de las personas que cumplen con la definición de "caso sospechoso" reporta haber acudido a una consulta médica. Ese es el dato que muestra el Monitoreo Nacional de Síntomas y Prácticas covid-19 (Movid-19), el estudio de la U. de Chile y el Colegio Médico que cuenta con casi 45 mil participantes en todo el país.
En su informe más reciente, el documento busca identificar cuáles son las barreras de acceso de la ciudadanía al sistema de salud, que dificultan que hoy existe un mayor diagnóstico precoz —y el consecuente aislamiento de sus contactos— de los casos confirmados. Los resultados serán presentados a la Mesa Social.
Según los datos de la encuesta, hay una disminución de la consulta entre el 6 y el 20 de abril, reduciéndose a un 20%, pero posteriormente aumenta hasta superar el 50% en la semana del 18 de mayo. El alza de la chance de consulta con el paso de la semanas "podría asociarse a una mayor conciencia ciudadana sobre el covid-19", señala el informe.
Sin embargo, la baja proporción de casos sospechosos que consultan con un doctor resulta preocupante debido a que, en sus informes anteriores, el mismo estudio graficó que las personas continúan saliendo a trabajar y realizar otras actividades con mayor probabilidad, pese a ser considerados como sospechosos.
Entre quienes consultan, se evidencia que aquellas personas afiliadas a isapres tienen un acceso superior a consulta médica que los que forman parte de Fonasa: entre el 4 y 18 de mayo, el porcentaje de personas en isapre que consultó subió de 40% a 60% aproximadamente, mientras que en Fonasa bajó levemente dentro del rango de 30%.
Una baja percepción del riesgo
Entre los motivos que más se repiten para no consultar dentro de la muestra, el primero es que las personas "esperan empeorar" antes de acudir a un médico, lo que ocurre en el 58% de los casos. En segundo lugar, se registra que un 27% considera que consultar "no es importante".
"Es decir, las dos razones mencionadas con mayor frecuencia se vinculan a la percepción de que el riesgo de estos síntomas es reducido", consigna el documento. Otros factores que aparecen son el costo de la consulta (7%), requerida para acceder a un examen de PCR, y el tiempo de espera para acceder a ella (5%).
La noción de que consultar "no es importante" y el costo de la consulta también destacan entre los motivos para no acudir a un médico pese a calificar como caso sospechoso
Entre las categorías que fueron mencionadas con frecuencia como texto libre por los participantes, y que no estaban incluidas dentro de las alternativas de respuesta predeterminadas, se encuentra el "temor al contagio" (16%) y la "saturación del sistema de salud" (18%).
Durante todo el tiempo de observación del estudio, se ha registrado que solo un 20% de quienes cumplen la definición de caso sospechoso se ha testeado para covid-19. En este dato también se refleja que hay más testeos dentro del sistema de isapres que de Fonasa.
En términos probabilísticos, se registra una mayor chance de no acudir a un médico entre mujeres y personas con enfermedades consideradas factor de riesgo para un cuadro grave por covid-19. Esta población es precisamente la que "se beneficia de un diagnóstico precoz y seguimiento clínico estrecho", explica el estudio.
Finalmente, el estudio recomienda "disminuir las barreras económicas para el acceso" y "mejorar la respuesta del sistema de salud para el diagnóstico precoz y seguimiento", además de "mejorar la comunicación de síntomas, riesgos y de la importancia de una consulta precoz".
En ese sentido, se menciona que "los llamados erráticos que se han dado por momentos a la ciudadanía sobre no consultar por cuadros aparentemente leves pueden haber contribuido a este fenómeno". Este lunes, la subsecretaria Paula Daza se mostró preocupada porque "las personas están retrasando su primera consulta" y recalcó que deben hacerlo "apenas inicien con sintomatología". "En la medida en que una persona consulta precozmente, vamos a poder tomarles el examen oportunamente y vamos a poder aislar", dijo.
