SANTIAGO.- La presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, dijo que les "sorprende" la decisión que anunciaron ayer las autoridades de iniciar un desconfinamiento gradual, a partir del lunes, en las regiones de Aysén y Los Ríos, pues esperaban que se contara con un plan más elaborado antes de que se adoptaran medidas en esa línea.
"Nos sorprende un poco la medida, porque nosotros habíamos conversado con el Gobierno que una de las primeras etapas era tener un plan de confinamiento y desconfinamiento, que permitiera identificar con claridad en qué etapa estaba cada una de las regiones y poder dar cuenta de estos indicadores, que esto se fuera cumpliendo, que fuera de conocimiento público y cómo se va a ir desarrollando (la desescalada) en los distintos ámbitos de la vida", dijo en radio Universo.
Siches comentó que "sí sabemos que, particularmente en la Región de Aysén, las cifras siempre han sido muy alentadoras; allá el equipo de la seremi que va siguiendo la pandemia ha sido muy efectivo, han interpuesto, por ejemplo, cuarentenas a todas las personas que lleguen a la región y con ello han logrado, desde el inicio, mantener un control de la pandemia".
No obstante, señaló que "en el caso de Los Ríos, quizás hay un poco más de dudas en torno a la condición basal" de esa zona.
"Pero yo creo que el tema de fondo que nos llama la atención era poder tener un plan mucho más estructurado antes de tomar acciones", sostuvo.
Al respecto, detalló que "lo que nosotros propusimos al Gobierno era crear un plan de escalada y desescalada del confinamiento, con una serie de indicadores" y afirmó que "el problema en este caso pasa por no tener ese plan establecido en el país y no lograr comunicarlo de forma efectiva".
"El indicador que no tenemos en ninguna parte es la trazabilidad"
Respecto de los cuatro criterios que el consejo asesor covid-19 sugiere considerar al momento de tomar la decisión de desconfinar una zona, Siches hizo ver que "el indicador que no tenemos en ninguna parte del país es el tema de la trazabilidad, porque es algo que recién se está montando a nivel nacional, como también los niveles de ocupación de camas, entendiendo que hoy día muchos pacientes se han trasladado a regiones, (porque) estamos funcionando como un gran centro centralizado de camas".
De todas formas, dijo que "comprendemos que, en la medida que estos indicadores (mejoren) –y a la par contando con un equipo y otras medidas para cumplir con una trazabilidad, testeo y aislamiento efectivo– de todas maneras nuestro país va a tener que empezar a adaptarse; y, en caso de que los indicadores se vayan deteriorando, estar muy conscientes de que va a haber que retroceder, no de forma tardía, sin que tomando acciones muy precozmente, para que no perdamos de vista el control de la pandemia".
También advirtió sobre lo que ocurrió recientemente en Londres, "donde hubo una pequeña apertura y salieron un montón de ciudadanos a las calles", pues dijo que "tenemos la percepción de que en nuestro país también la ciudadanía está muy esperanzada de estas aperturas".
Por eso, sostuvo que es importante que se clarifique "que aquí no se ha resuelto nada y cualquier espíritu de apertura va a ser para poder disminuir el impacto en salud mental, efectos sociales, como también económicos, pero que estamos todavía muy distantes de poder entrar a una suerte de funcionamiento normal".
"Nos pasó con la 'nueva normalidad' y el 'retorno seguro', donde no solamente la ciudadanía cambió sus actitudes, (también) las reuniones de Gobierno, cómo funcionaban los programas de televisión, todo cambió con un plan que se implementó de forma errónea; y aquí tiene que ser (con) una cautela sustantiva, porque lo natural de la ciudadanías es ser gregario, es intentar volver a juntarse", señaló.