SANTIAGO.- En medio de una fuerte presión oficialista, finalmente el Presidente Sebastián Piñera realizó este martes un nuevo cambio de gabinete que significó una cirugía mayor en su comité político de ministros y el movimiento también de otros cargos sectoriales. Ajuste que equilibra el peso de las facciones de RN y la UDI al interior de La Moneda.
Los cambios incluyeron al titular del Interior,
Gonzalo Blumel (Evópoli), por el senador
Víctor Pérez (UDI), la salida de
Claudio Alvarado (UDI) de la Segpres por
Cristián Monckeberg (RN). Mientras que a la Segegob llegará el diputado
Jaime Bellolio (UDI), en reemplazo de
Karla Rubilar (IND), quien ahora estará en Desarrollo Social.
Asimismo, se produjeron otros movimientos a nivel sectorial con la salida de Teodoro Ribera de la Cancillería (RN), cuyo puesto ocupará el senador Andrés Allamand (RN), enroque que también se producirá en Defensa, cartera que dejará Alberto Espina (RN) y a la que llegará el diputado y timonel de RN, Mario Desbordes.
Equipo con el que el Mandatario buscar dar vuelta la página e imprimirle un nuevo aire a su gestión, previo a la Cuenta Pública que entregará el próximo viernes ante el país. A la vez que se espera que esto sirva para superar la crisis que se vive en el oficialismo.
Los cambios de Piñera
Tal y como se esperaba, el ajuste estuvo marcado por la salida del titular del Interior, Gonzalo Blumel, quien en las últimas semanas estuvo en el foco de las críticas por parte de la UDI, quienes acusaban debilidad en su gestión, no sólo en lo que respecta a la seguridad, sino que también en materia política. Desde el gremialismo, le reclamaban el no poder alinear a Evópoli a favor del veto a la ley de límite a la reelección, al cual finalmente el Ejecutivo no adhirió.
Pero fue finalmente el quiebre que provocó la aprobación del proyecto de retiro del 10% de los fondos de las AFP con votos de diputados y senadores de Chile Vamos, lo que para muchos generó un alto costo para él y sus colegas del comité político.
Hito que no sólo dejó un equipo para muchos "debilitado", sino que también implicó un duro revés para el propio Mandatario, quien apostó incluso su propio capital político haciendo gestiones para intentar ordenar al conglomerado, lo cual finalmente no se logró.
En su lugar entrará el senador de la UDI Víctor Pérez, quien es un histórico dirigente del partido y cercano a la timonel gremialista, Jacqueline Van Rysselberghe, quien fue una de las principales críticas de Blumel. Con lo cual Piñera recurrió a una fórmula usada también en su primer mandato, cuando recurrió también a rostros del Congreso para completar su elenco.
Y pese al poco tiempo que llevaba en el cargo, el ministro Claudio Alvarado dejó la Segpres, donde será reemplazo por Cristián Monckeberg, hasta hoy en Desarrollo Social, y que es cercano a la mesa de RN, partido el cual en el pasado presidió.
La llegada de Monckeberg al comité político se señaló desde un inicio que era para reafirmar el peso de la colectividad en el corazón del Gobierno.
En Desarrollo Social, en tanto, llegará Karla Rubilar, quien hasta esta mañana era la vocera de Gobierno e incluso estuvo en varios programas de radio y TV desplegada. Rubilar llegó al gabinete durante el estallido social del pasado 18 de octubre a dar un sello distinto a la vocería y que ahora con este nuevo cargo recuperaría mayor presencia en terreno, algo que, dicen, siempre le ha gustado.
Su puesto, en cambio, será ocupado por Jaime Bellolio, quien ha competido por la presidencia de la UDI, siendo parte actualmente de la disidencia a la actual mesa, por lo que representaría una sensibilidad distinta al interior del gremialismo. Con su nuevo puesto también deja una vacante en el Congreso.
Otro cambio que se gestó fue en la Cancillería donde salió Teodoro Ribera, siendo reemplazo por el senador Andrés Allamand, siendo la segunda vez en que esté último renuncia al Congreso para sumir como ministro. Ya lo hizo en el gobierno anterior de Piñera, cuando fue nombrado en Defensa.
Por otra parte, en Defensa se hará un enroque entre
Alberto Espina y el diputado y actual timonel de RN,
Mario Desbordes, siendo este último una de las grandes sorpresas del cambio, dado que había previamente manifestado su intención por postular por un nuevo periodo a la presidencia de la tienda.
La llegada de Allamand y Desbordes al gabinete busca incluir a dos facciones distintas dentro de RN, mientras el primero ha sido parte de la disidencia a la directiva, el segundo representa a la actual mesa. Ambos en los últimos días han dejado de manifiesto sus diferencias y se esperaba que pelearan por la conducción del partido o al menos en el caso del primero que apoyara la lista de desafiante.
En el caso de Evópili, en el partido resienten la salida de Blumel del Gobierno, quien dicen pagó los costos políticos de la crisis en Chile Vamos. El partido queda con un solo ministro en el comité político por la permanencia de Ignacio Briones en Hacienda.