El 87% de los escolares cuenta con algún dispositivo que les permita educarse a distancia, indica el informe.
El Mercurio (Imagen referencial)
SANTIAGO.- Pese a lo extendida que pareciera estar la modalidad de clases remotas, un estudio del Ministerio de Educación y el Banco Mundial señala que menos de la mitad (el 40%) de los escolares chilenos se encuentran en establecimientos educacionales que han entregado formación a distancia de manera masiva durante la pandemia.
La cifra guarda grandes diferencias, ya que en los establecimientos de mayor vulnerabilidad (primer quintil) la cobertura de la educación a distancia es de apenas el 27%, mientras que en los colegios donde asisten estudiantes de mayores recursos (quintil 5) sube al 89%.
En cuanto al acceso que tienen los estudiantes a ese tipo de formación, la cifra es más alta, ya que, en promedio, el 87% de ellos cuenta con algún dispositivo que les permita educarse a distancia.
No obstante, también hay una brecha entre los quintiles de mayor y menor vulnerabilidad, donde el acceso es de 77% y 97%, respectivamente. Además se registran diferencias según la dependencia, ya que el 82% de los alumnos de establecimientos públicos cuenta con acceso a esos dispositivos, que en el caso de los alumnos de colegios particulares pagados sube a 97%.
El estudio señala que, junto con las condiciones anteriores, la educación a distancia también requiere que el estudiante pueda aprender de una manera más autónoma, capacidad que va decreciendo a medida que ese tipo de formación es más prolongada, pues se debilita el vínculo estudiante-escuela, lo que hace que disminuya su compromiso con el proceso pedagógico. Según el informe, la capacidad de aprender de forma autónoma sería de un 85% si la situación se extiende por seis meses y bajaría al 34% si se prolonga por diez.
Considerando los distintos factores, el informe sostiene que, si la educación a distancia se extiende por seis meses, podría mitigar un 30% del efecto total provocado por el cierre de las escuelas, mientras que si dura diez meses podría mitigar solo el 12%.
El ministro de Educación, Raúl Figueroa, comentó que "todos sabemos que las clases presenciales son el mejor antídoto para enfrentar esta crisis en materia educacional, pero mientras no se pueda volver en algunos lugares, vamos a trabajar por mitigar lo más posible estas consecuencias".