Cada vez se ve más lejana la posibilidad de cumplir la meta del "Hambre cero" en el continente, establecida en los objetivos del milenio de la ONU. Todo esto, según el informe "Panorama de la Seguridad alimentaria y nutricional en América Latina y el Caribe 2020", presentado ayer. El documento señala que, en 2019, 47,7 millones de personas en América Latina y el Caribe pasaron hambre, y que esto ha empeorado durante los últimos cinco años, con un aumento de 13,2 millones de personas con subalimentación. En Chile, las áreas rezagadas en cuanto a malnutrición infantil se concentran en los extremos del país. Por ejemplo, las regiones más afectadas por la desnutrición crónica infantil se encuentran al norte, en Tarapacá (6,4%), Atacama (6,1%), Arica y Parinacota (5,8%), con excepción de la RM (6,1%). En contraparte, el sobrepeso infantil se concentra al sur, en La Araucanía (18,9%), Magallanes (18,7%), Ñuble (18,6%) y Los Ríos (18,6%). La directora de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Chile, Eve Crowley, afirma que los resultados del informe "son muy preocupantes, porque en un país como Chile ninguna persona debería tener desnutrición".