Como un "proceso muy exitoso" fue calificado por el Ministerio de Salud el arranque del plan nacional de vacunación para enfrentar la pandemia de covid-19, que comenzó el 24 de diciembre entre el personal de salud de las regiones más críticas. Ellos recibieron, de forma voluntaria, la vacuna elaborada por Pfizer.
En total, informó el ministro Enrique Paris, se logró administrar la vacuna a 8.649 funcionarios: 5.716 en la Región Metropolitana, 2.057 en el Biobío, 711 en La Araucanía y 165 en Magallanes. El número equivale al 99% de los trabajadores que se habían inscrito para recibir la primera dosis y un 64% del total corresponde a población de sexo femenino.
Según dio a conocer la autoridad sanitaria, se reportaron casos de personas que experimentaron "efectos adversos menores" luego de recibir la vacuna, como "fiebre, dolor en el brazo o que sienta algún hormigueo". "Son aproximadamente 20 personas y es obligación que los centros de salud reporten", explicó Paris. "Son efectos que normalmente ocurren en toda campaña de vacunación", añadió.
Adicionalmente, se reportó "una TENS con efectos adversos un poco mayores, que fue sometida a exámenes de laboratorio y fueron todos normales". "Se hizo una resonancia nuclear magnética y una punción lumbar, además de otros exámenes, y afortunadamente ha evolucionado muy bien, por lo tanto estamos tranquilos", dijo el ministro.
En proporción, la cantidad de personas que reportaron algún tipo de reacción desfavorable a la vacuna en esta primera etapa de administración corresponde a un 0,2% del total de población que recibió la dosis.