Un nuevo hecho se ha sumado a las peticiones de avanzar en la Reforma a Carabineros, ingresada al Congreso en noviembre de 2018 por el
Gobierno del Presidente Sebastián Piñera. La muerte de un joven malabarista en Panguipulli tras recibir el disparo de un policía el pasado viernes, ha vuelto a agilizar el debate entre organizaciones, actores políticos y la opinión pública.
Pero el llamado a la urgencia para avanzar en el proyecto que
moderniza la gestión institucional y fortalece la probidad y la transparencia en las Fuerzas de Orden y Seguridad Pública, no es nueva. Luego de la crisis generada en Carabineros tras el estallido social, el Gobierno ingresó modificaciones al proyecto que ya había sido despachado por el Senado el 15 de octubre de 2019.
Luego, el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, convocó el 8 de diciembre a un Consejo para la Reforma de Carabineros de Chile, que tuvo 50 días para entregar un documento con propuestas destinadas "a mejorar la eficacia en el control del orden público, con pleno respeto a los Derechos Humanos", según consigna el documento explicativo del Consejo Asesor, cuyas recomendaciones se conocieron el 17 de marzo de 2020.
El 31 de agosto el Gobierno presentó indicaciones, y el 22 de septiembre, el Ejecutivo entregó un informe financiero complementario, que actualizaba la estimación de gasto fiscal que tendría el proyecto, "con el objetivo de que sea conocido por la comisión de Hacienda, en su respectivo trámite", detalla el documento firmado por el director de presupuestos del Ministerio de Hacienda, Matías Acevedo.
El texto fue aprobado por la Sala de la Cámara el 1 de octubre, por lo que fue despachado al Senado a tercer trámite con modificaciones y 32 principales enmiendas de los diputados.
Entre ellas, se suprimió el artículo que establece la obligación de que carabineros se rija estrictamente por el principio de probidad administrativa; se suprimió el artículo que obliga a Carabineros a respetar los derechos humanos; se agregó un artículo que establece la proporcionalidad en el uso de la fuerza por parte de Carabineros y el uso de medios no violentos "en la medida de lo posible".
En qué va la tramitación del mensaje presidencial
El pasado 19 de enero de 2021,
el proyecto pasó a comisión mixta,
luego que la Sala del Senado rechazara, en forma unánime, las enmiendas que le introdujo la Cámara de Diputados a la iniciativa.
En la oportunidad, el senador Felipe Kast (Evópoli) sostuvo que "La idea es rechazar este proyecto, no porque estemos en contra de él, sino que para avanzar en una Comisión Mixta, pues hay una serie de elementos que es necesario revisar".
Por su parte, el senador Francisco Huenchumilla (DC) destacó que "es necesario ir a una Mixta y buscar un acuerdo porque todos hemos sido testigos de la necesidad de modernizar Carabineros y las policías en general... de una manera inexplicable se suprimió el corazón del proyecto".
Esa misma jornada, la presidenta de Senado, Adriana Muñoz, constató en oficio que tras el rechazo, "corresponde, en consecuencia, la formación de una Comisión Mixta que deberá proponer la forma y el modo de resolver las divergencias suscitadas entre ambas Cámaras (...) Al efecto, la Corporación designó a los Honorables senadores miembros de la Comisión de Seguridad Pública para integrar la referida Comisión Mixta".
Esta última, está integrada por los senadores Francisco Huenchumilla (DC), José Miguel Insulza (PS), Felipe Kast (Evópoli) y Marcela Sabat (RN), y un cupo que resta por definir para ocupar el puesto de Felipe Harboe.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Diego Paulsen, tomó razón el 20 de enero, estableciendo dicha corporación acordó que los diputados que concurrirán a la formación de la comisión mixta son: Miguel Ángel Calisto (DC), Raúl Leiva (PS), Maite Orsini (RD), Sebastián Torrealba (RN) y Osvaldo Urrutia (UDI).
El 26 de enero, el Gobierno volvió a poner suma urgencia a la tramitación, última actividad que ha tenido el mensaje presidencial, según el registro histórico que presenta la tramitación correspondiente al boletín 12.250-25.
Comisión Bicameral de Seguridad Pública
Más allá del proyecto en específico de modernización, aún resta avanzar en una serie de temas pendientes que dan estructura a la Reforma a Carabineros, "los que serán revisados en una comisión bicameral de Seguridad Pública", aclara a Emol el
senador PS, José Miguel Insulza.
Dicha comisión fue acordada el pasado 7 de enero en sesión especial del Senado, instancia que buscará crear un espacio de diálogo y análisis permanente en torno a la agenda de Seguridad Pública, a raíz de los hechos de violencia delictual, recrudecidos en el último tiempo.
A su juicio, el proyecto en sí mismo "no enfrenta todavía la crisis de Carabineros, no es suficiente, porque hay otros temas mucho más de fondo que tienen que definirse aún, y no son menores". Entre ellos, "la organización institucional policial, la formación y carrera de Carabineros, la especialización policial y, uno de los temas más candentes hoy, el orden público", destaca Insulza.
La comisión continúa operativa durante los viernes de febrero, y ya tuvo su primer encuentro telemático el viernes pasado, donde "se hizo una presentación bastante completa de estos cuatro puntos de reforma", explicó el senador. También se invitó a los miembros independientes de la Unidad Coordinadora de la Reforma, precisamente para avanzar en coordinaciones. El 12 tendrán un receso, para retornar el viernes 19 de forma telemática, y el 26 de ese mes, que será presencial.
Un debate más profundo que avanzar en una ley
Antonio Frey, ex subsecretario de Prevención del Delito del segundo Gobierno de Michelle Bachelet, es uno de los cuatro miembros de la Unidad Coordinadora que participó en la instancia del viernes. Su primer análisis es que "esta reforma sobrepasa lo que pueda hacer este Gobierno, el próximo y el subsiguiente, porque es una reforma compleja y larga, que significa repensar y reconfigurar lo que se armó y reconstruyó durante el régimen autoritario que era un régimen militar-policial", según dijo a Emol.
"Se tiene que configurar una idea transversal y como política de Estado, de todos los sectores políticos que permita un acuerdo de ir avanzando en esta idea de cambio. Si no, vamos a tener distintas versiones que van a chocar, y la policía, en vez de unir a los chilenos, va a ser un factor de división, como es hoy día".
Antonio Frey, miembro de la Unidad Coordinadora de la Reforma
Pese a que en 2005 la reforma constitucional "termina con uno de los problemas centrales, que era que las FF.AA. eran los garantes de la institucionalidad", dice que esa configuración igualmente dejó un pedazo lógico "
de la excesiva independencia respecto al poder político", reflexiona.
Por eso, enfatiza que es fundamental que ahora avance el debate político. "Se tiene que configurar una idea transversal y como política de Estado, de todos los sectores políticos que permita un acuerdo de ir avanzando en esta idea de cambio. Si no, vamos a tener distintas versiones que van a chocar, y la policía, en vez de unir a los chilenos, va a ser un factor de división, como es hoy día".
"Chile no puede seguir esperando la profunda e integral reforma que Carabineros necesita. Lo esencial es que Carabineros se subordine plenamente al poder civil. La reforma debe tener un enfoque de derechos humanos y comenzar por revisar su doctrina, su estructura orgánica y jerárquica".
Sergio Micco, director del INDH
El mensaje que dice haber planteado en varias oportunidades
que no se superpongan leyes a la reforma, sin zanjar el marco estructural, "como la ley 20.502 del Ministerio del Interior, que terminan no satisfaciendo las necesidad, incluso de las propias autoridades políticas. Porque hay una excesiva autonomía -de la policía- en materias que en ninguna democracia las hay".
Por su parte, Sergio Micco, director del Instituto Nacional de Derechos Humanos, quien participó como observador del Consejo de Reforma a Carabineros, reiteró su disposición a promover y participar del diálogo, valorando todas las instancias que se han generado para el avance en la reforma, sin embargo, enfatiza en la necesidad de avanzar prontamente en la materia.
"Chile no puede seguir esperando la profunda e integral reforma que Carabineros necesita. Lo esencial es que Carabineros se subordine plenamente al poder civil. La reforma debe tener un enfoque de derechos humanos y comenzar por revisar su doctrina, su estructura orgánica y jerárquica. Luego, avanzar en temas de formación y capacitación, inicial y permanente, y contar con nuevos y mejores protocolos. Finalmente, revisar los mecanismos de selección, ascenso y retiro", enfatizó.
¿Habrá modificación en el proceso tras lo ocurrido en Panguipulli?
Consultado al senador Insulza por una "presión" desde la opinión pública a raíz del reciente hecho ocurrido en Panguipulli, sostiene que "cada vez que hay una crisis, todo el mundo llama a hacer algo en Carabineros, pero un par de meses después se estabiliza, aunque siempre la aceptación queda un poco más baja.
Nosotros no podemos hacer una reforma a fondo sobre la base de acontecimientos de un día para otro (...) tenemos que salir con una reforma integral, esta comisión no está para salir al paso de cualquier problema que exista", plantea.
Para Franz Vanderschueren, doctor en Sociología e integrante del Consejo para la Reforma a Carabineros, tampoco sería un factor para que el proceso avance más rápido. "No creo que los graves hechos de Panguipulli modifiquen el proceso largo y difícil de reforma de Carabineros de Chile, sino que evidencian una vez más una crisis de la institución que ha perdido la indispensable sintonía con la mayoría de la población", planteó a este medio.
Micco, por su parte, cuestionó el actuar de la policía tras lo ocurrido en Panguipulli. "Hay formas de actuar de la institución que se repiten en el tiempo. Carabineros tiene que evitar declaraciones precipitadas en este tipo de casos. Antes de salir a defender los procedimientos, debe investigar los hechos y recopilar todos los antecedentes. Cuando no lo hace, solo contribuye a aumentar la desconfianza pública ya instalada", zanjó.