Si bien el Ministerio de Salud ha puesto su foco en incrementar la capacidad de los recintos asistenciales para recibir pacientes críticos por covid-19, la alta demanda que hoy vive el sistema ha generado que muchas veces en los recintos no existan cupos. Mientras en junio del año pasado alrededor de un tercio de las personas fallecidas no eran hospitalizadas, esa proporción bajó a cerca del 20% durante los meses posteriores al primera peal de la pandemia. Pero actualmente, llega a casi el 50% de todos los fallecidos durante las últimas semanas. "Para los pacientes con covid hay menos camas disponibles que en la primera ola, porque hay un porcentaje importante que está ocupado por otras patologías", plantea el ex subsecretario de salud Pública, Jaime Burrows.