Kínder obligatorio es rechazado en Comisión Mixta con votos de parlamentarios de oposición

SANTIAGO.- Los aspectos centrales del proyecto de ley del Ejecutivo que establecía el kínder como obligatorio fueron rechazados este lunes en Comisión Mixta. La iniciativa buscaba materializar la reforma constitucional aprobada en 2013 que estableció la obligatoriedad de ese nivel, dejándolo sujeto a la aprobación de esta ley.

El proyecto había sido aprobado por unanimidad en la Cámara de Diputados y luego rechazado en el Senado en sus artículos esenciales. Tras esto la discusión pasó a Comisión Mixta, donde las principales modificaciones a la actual legislación fueron rechazadas con seis votos en contra de parlamentarios de oposición y cuatro a favor de legisladores oficialistas.

"El año 2013 se aprobó una reforma constitucional, que establece en la Constitución la obligatoriedad de kínder; esa misma reforma señala que una ley debe hacerse cargo de la implementación de esta política, y para ello se requería modificar la Ley General de Educación; este proyecto de ley modificaba la Ley General de Educación para implementar en concreto la obligatoriedad del kínder y ésos son los cambios que se rechazaron", explicó el ministro de Educación, Raúl Figueroa.

La autoridad dijo a Emol que "nos parece muy lamentable que senadores y diputados de oposición hayan decidido rechazar esta iniciativa, que tenía su origen en una reforma Constitucional que había sido aprobada por amplia mayoría el año 2013 y, además, este proyecto en particular había sido aprobado por unanimidad en la Cámara de Diputados".

El ministro sostuvo que "este rechazo perjudica el desarrollo de la política de educación parvularia y lo consideramos como una pésima señal respecto de la importancia de este nivel educativo". "Nos sorprende además que se haya rechazado, porque habíamos presentado formalmente una serie de propuestas que se hacían cargo de las inquietudes que se habían planteado en la discusión y, con todo, la oposición opta por rechazar, en lo que a mi juicio es una señal política que termina perjudicando la educación parvularia", afirmó.

Ahora, el informe de la Comisión Mixta debe ser votado tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. En caso de aprobarse, el Presidente de la República puede promulgar dicho texto o bien insistir en el proyecto original con un veto, el cual debe ser votado por ambas cámaras.

Consultado si el Ejecutivo ejercerá esa acción, el ministro Figueroa señaló que "para nosotros la educación parvularia es fundamental y, por tanto, vamos a realizar todos aquello que sea necesario para insistir en ésta y otras políticas de educación parvularia que, lamentablemente, han sido bloqueadas en su discusión en el Congreso".

Según datos del Mineduc –dados a conocer en abril–, este año, en medio de la pandemia, 4.687 niños a quienes les correspondía ir a kínder no fueron matriculados, un 47,5% más que en 2020, y un 138,5% más que en 2019.

Durante la discusión del proyecto, varios legisladores, entre ellos el senador Carlos Montes, advirtieron que existía el riesgo de una "escolarización de la etapa parvularia", principalmente "cuando es cursada en colegios, donde hay enseñanza básica y, eventualmente, media, porque se tiende a mimetizar con los niños de 1° y 2° básico en todo lo cognitivo".

En respuesta a la inquietud –según publica el Senado–, el Ejecutivo presentó una indicación que señalaba que "aquellos establecimientos educacionales que impartan tanto los niveles de educación parvularia como educación básica deberán cautelar que los objetivos generales que esta ley establece para cada uno de ellos sean fomentados específicamente en el nivel correspondiente".

Otra aprensión, manifestada entre otros por la senadora Yasna Provoste (DC), apuntaba a que se podría producir una "desescolaridad de los niños y niñas que no cursen kínder". Al respecto, el Ejecutivo incorporó la precisión de que, pese a la obligatoriedad del kínder, quienes no lo hayan cursado, por el motivo que sea, entran directamente a primero básico y en este nivel se evaluará para nivelar.

Este lunes, tras haberse rechazado la iniciativa, la senadora Provoste señaló a través de Twitter que el proyecto "era un buen titular con un mal contenido", ya que "lejos de asegurar el kínder a los niños de Chile, ponía barreras de acceso a la educación básica, escolarizando erróneamente la educación inicial".

"Cuando se conoce la realidad de los diversos territorios de Chile se entiende que exigir el kínder a niños y niñas que viven alejados de centros urbanos que cuenten con jardines, es condenarlos a quedar fuera del sistema educacional", afirma la senadora. Agrega que "junto con el proyecto de 'Nueva Subvención a los Niveles Medios' y la mal llamada 'Sala Cuna Universal' son nuevos intentos de privatizar la educación de los niños y niñas de Chile. Lamentablemente, este gobierno sigue sin entender el rol de lo público en la educación".

En la misma línea, el senador Jaime Quintana (PPD) comentó a Emol que "esto yo lo advertí hace casi una década, cuando se discutió en el Congreso la reforma constitucional, y las razones son muy similares a las que tenemos hoy: Hay un 4% ó un 5% de apoderados que no envían a sus niños a kínder, pero hay que atender las razones por lo que eso ocurre, eso responde fundamentalmente a territorios de la alta cordillera, del norte, del sur del país, sectores muy apartados, en donde no hay ninguna posibilidad de enviar a los niños a kínder porque sencillamente no hay kínder".

"Si alguien cree que porque le ponemos en la ley que ahora es obligatorio la gente va a ir, eso es no entender lo que pasa en el país hoy día, es no entender los contextos de pandemia; hoy día tenemos un mayor ausentismo en estos niveles escolares; creo que la tarea hoy día es otra, cómo recuperamos matrícula ahí y eso es dialogar más que obligar", sostuvo.