"Detrás del delantal blanco se esconden cosas oscuras", reza el título de una carta emitida por el sindicato número 2 del Colegio Médico, en la cual los trabajadores del Club de Campo de la organización denunciaron una serie de prácticas antisindicales por parte de la directiva encabezada por Izkia Siches.
En el texto, los funcionarios expresaron su rechazo a las políticas implementadas por la profesional, luego del despido de siete personas por motivos de la empresa, en circunstancias de que la entidad, de acuerdo a los testimonios de los dirigentes sindicales, no posee problemas económicos.
"El despido colectivo no hace otra cosa que
develar el doble discurso de quienes representan la asociación y muy particularmente de la doctora Siches, quien ha expresado la necesidad que el empresariado mantenga la fuerza laboral en tiempos tan difíciles como las vivido estos dos últimos años por motivos pandémicos", dijeron.
En esa línea, manifestaron que "lamentamos que las prácticas neoliberales se sobrepongan una vez más contra las fuerzas laborales, aduciendo una crisis económica inexistente, en tanto la Asociación Gremial sigue gozando de buena salud financiera, con mayor cantidad de colegiados, según lo señalado por ellos mismos".
"Ante tales decisiones, hacemos un llamado de actuar en consecuencia, y abandonar discursos demagógicos con una retórica que la hace aparecer, oportunistamente, como defensora de los trabajadores y de los necesarios cambios para conseguir justicia social, mientras tanto en su propia organización se llevan a cabo este tipo de injusticias", recalcaron.
Asimismo, aseguraron que "las malas prácticas que buscan atomizar las organizaciones sindicales, so pretexto de estado financiero deficiente, consiguiendo con ello desmejorar los beneficios conseguidos mediante contrato colectivo entre las partes".
La versión de los trabajadores
Al respecto, la presidenta del Sindicato N°2, Judith Barrales, explicó a Emol que el Colegio Médico tiene tres sedes en Santiago, una en la calle Esmeralda en Santiago, donde está emplazada la dirección nacional, otra en Ñuñoa y la del Club de Campo ubicado en Lo Barnechea, que es la que ellos representan.
Según su relato, desde la creación del sindicato la actual directiva de Siches "nos tienen bajo una persecución constante, Querían echar al administrador y como era el presidente del sindicato no pudieron despedirlo y de ahí fue una guerra. Contrataron a un gerente de operaciones que trata a la gente con la punta del pie".
"Hicimos una denuncia en la Inspección del Trabajo
y les pasaron multa en dos oportunidades. Hemos hecho reclamos al directorio, hay beneficios que hasta hoy no han cumplido, estamos empezando agosto y no nos han entregado el uniforme de invierno que tenia que ser entregado en abril", añadió.
Además cuestionó que el club "ha funcionado casi toda la pandemia. Estuvo cerrado dos meses, donde estuvimos con teletrabajo, pero apenas pasaban a Fase 2 la gente tenía que volver a trabajar, no así en el centro o en Ñuñoa, que han estado con teletrabajo toda la pandemia”.
"Para ellos, que se haya formado un nuevo sindicato fue fatal. De 40 trabajadores, 30 estaban sindicalizados y ahora quedamos 10. Nos destrozaron, porque cuando nos formamos, nos despidieron a 4 de inmediato, luego teníamos negociación y la gente en el Club se asustó y no pudimos contener a la gente", lamentó.
Según Barrales, "ahora nos echaron a 7 trabajadores y aluden a necesidades de la empresa, pero no hay problemas económicos. Se han gastado millones de pesos en la construcción de una piscina temperada y más de 300 millones en la instalación eléctrica, luego de que falleciera electrocutado un compañero hace tres años".
En cuanto a la relación con la mesa directiva, acusó que "ellos ni siquiera se han presentado ante nuestros sindicato, todas las direcciones anteriores han hecho reuniones con todos los trabajadores y esta directiva nada. Hicieron una reunión cuando murió el compañero, pero después de eso, nada".
"Por la cantidad de funcionarios que tenemos, una paralización no les afectaría nada. Lo que vamos a hacer es una demanda por los despidos, porque no puede ser que digan que son necesidades de la empresa y no tienen problemas económicos. Siches llama al empresariado a cuidar a sus trabajadores y acá no los cuidan", concluyó.