En un enigma se transformó en las últimas dos semanas la enfermedad que verdaderamente afecta al convencional Rodrigo Rojas Vade, quien reconoció haber mentido sobre el cáncer que dijo que padecía y cuyo tratamiento le habría generado una deuda bancaria de casi $27 millones.
Para justificar sus acciones, luego de conocerse el engaño, explicó que lo hizo porque tenía otra enfermedad que era "discriminada en este país".
Finalmente, el abogado Tomás Ramírez, que representa a Rojas Vade, aceptó detallar las dolencias que afectan al convencional en conversación con "El Mercurio".
Y aclara que la revelación no cambiaría el escenario judicial que enfrenta el convencional en la investigación que lleva el Ministerio Público para determinar si incurrió en el delito de perjurio o no.
Problemas de coagulación y afectaciones a la piel
Uno de los ejes de la indagatoria que dirige el fiscal jefe del Centro de Justicia de la jurisdicción metropolitana Centro Norte, Patricio Cooper, gira en torno a las verdaderas enfermedades que sufre Rojas, por lo que ya requirió al Ministerio de Salud su historial de atenciones médicas.
El abogado Ramírez asegura que entregarán los documentos que acreditan las dolencias. Pero detalla que aún está a la espera de un diagnóstico definitivo y que Rojas Vade ha tenido graves síntomas como "cefaleas, náuseas, ulceraciones, afectaciones a la piel, y problemas de coagulación que se manifiestan con pérdida de sangre. Ha debido ser hospitalizado varias veces, tanto en la Clínica Alemana como en la Clínica Bupa, donde logran que se recupere y le hacen exámenes para descartar otras patologías".
Y revela una cronología médica del convencional: "Ha tenido diversas patologías desde 2013, por lo que, lamentablemente, no pudimos entregar de inmediato toda la información, ya que debía verificarlas a través de documentos médicos. En marzo de ese año, por ejemplo, se realizó un examen donde resultó reactivo a Treponema Pallidum, es decir, sífilis. En adelante tuvo que ingresar de urgencia a la clínica, por diversos síntomas graves".
El abogado señala que después "sus diagnósticos fueron cambiando, desde síndrome disentérico, síndrome emético, reacción adversa a medicamentos, síndrome vertiginoso, entre otros. Ha tenido dos diagnósticos que se reiteran: la Enfermedad de Behcet y la Púrpura Trombocitopénica Ideopática. Esto no implica que sea su diagnóstico definitivo, sobre todo teniendo presente que ahora, con toda la información, probablemente deba reiniciar un trabajo con distintos especialistas".
Atención privada y “bicicleta financiera”
—¿Qué tipo de seguro médico tuvo Rojas? ¿Por qué se generó una deuda por estas prestaciones
—Su cobertura de salud es a través de Isapre, ya que hasta el año pasado tuvo trabajo en una línea aérea. La deuda se genera por los costos de hospitalización, de consultas médicas, exámenes y medicamentos, teniendo en consideración de que se trata de problemas que se arrastran desde hace ocho años. Fue despedido en abril de 2020 y después se organizó la rifa para ayudarlo económicamente.
Ramírez explica también por qué no uso el sistema de salud público: "Por regla general, las personas tendemos a buscar la mejor atención de salud posible, sobre todo teniendo presente las dificultades para enfrentar sus síntomas, y mientras tuvo trabajo mantuvo esta 'bicicleta financiera'. Por lo que entiendo, esta es la razón para seguir atendiéndose en el sistema privado".
También aborda la interrogante sobre si las atenciones médicas sustentan la deuda con los bancos informada en la declaración de interés y patrimonio: "Desde el punto de vista jurídico penal me parece que no tiene relevancia para determinar si la conducta se adecua o no al tipo penal, pero en todo caso, aclarar la situación es importante para la ciudadanía y permite entender el fondo del problema, más allá de si es penalmente relevante o no. Se trata de hospitalizaciones de alto costo respecto de las cuales, como cualquier persona que se enfrenta a esa situación, se genera una dinámica financiera coloquialmente llamada 'bicicleta', por lo que la deuda se pagó en parte, pero como han persistido los síntomas, ha debido ser hospitalizado nuevamente".
Declaración de intereses y patrimonio no tiene impacto penal
Sobre la mentira con que la justificó las obligaciones bancarias agrega que "ciertos funcionarios públicos tienen la obligación de efectuar esa declaración, y si no lo hacen, es inexacta o incompleta. La Contraloría exige que se cumpla con la ley, pero no se aplican sanciones por ese mero incumplimiento. Además, respecto de las deudas la ley exige que se señale cuáles son, no que se explique el origen. Atendido lo anterior, existiendo la posibilidad de rectificar montos y origen sin que tenga consecuencias en este nivel administrativo, carece de sentido que sí lo tenga en el ámbito penal".
"Entregaremos todos los antecedentes para acreditar los diagnósticos y los procedimientos médicos, y demostraremos que su conducta no es constitutiva de delito", dice Ramírez.
—¿Por qué Rojas ocultó sus verdaderas dolencias? ¿En qué sentido lo afectaba revelar la verdad? Porque él dijo que lo mantuvo oculto para no ser estigmatizado.
—Según él me señala, su versión sobre que tenía cáncer comienza en 2013 con el diagnóstico de sífilis, pero algunos síntomas continuaron apareciendo en sus siguientes hospitalizaciones, por lo que mantuvo la misma versión desde esa época.
—Ahora que se revelan las enfermedades, ¿cree que a la fiscalía se le facilita descartar o, al contrario, confirmar un posible delito en este caso?
—Luego de que entreguemos todos los antecedentes, el Ministerio Público deberá tomar una decisión sobre cómo proseguir, que es una decisión autónoma y no depende de esta defensa.
El abogado señala que "a nuestro juicio, no debería tener efectos penales, pues no cometió perjuicio. Pero evidentemente es distinto que nunca haya tenido estos síntomas o que nunca haya recibido atención médica, en especial para las personas que han sufrido al enterarse que no tenía cáncer".
—Esta semana se acogió a trámite una querella por perjurio presentada contra Rojas. ¿Cómo reacciona ante la decisión del juez Daniel Urrutia?
—Solicitamos la inadmisibilidad de la querella por razones procesales y el tribunal adoptó una decisión con la que no concordamos, pero es parte de la litigación no estar de acuerdo con las resoluciones judiciales.
Sobre la resolución del juez, que habla de “transparencia”, Ramírez dice: “El caso se va a trasparentar con o sin otros políticos entremedio”.
