Este lunes, Rodrigo Rojas Vade anunció que dejará de asistir a la Convención Constitucional 16 días después de reconocer que no padece cáncer, lo cual generó una serie de reacciones al interior del órgano. Mientras su directiva espera recibir una confirmación oficial, sus pares de Vamos Chile apuntaron que su salida se debe producir "sin letra chica".
Al respecto, el vicepresidente adjunto de la mesa, Pedro Muñoz (Colectivo Socialista) explicó que "se trata de una renuncia de hecho y la Convención se dará por notificada no por las redes sociales ni los medios de comunicación, sino cuando ingrese un documento formal a la oficina de partes".
"La Convención buscará a través de las reglas existentes o las que están por crearse los mecanismos para materializar esa decisión (…)
hay que ver todas las consecuencias jurídicas que acarrea una renuncia presentada formalmente ante la Convención, los temas administrativos, los temas financieros, tendrán que evaluarse", añadió.
En tanto, desde Vamos Chile, apuntaron a la necesidad de que la salida de Rojas Vade se produzca lo antes posible. Por ejemplo, el constituyente Eduardo Cretton (UDI) señaló que "esta renuncia no puede ser con letra chica. Intentar reemplazar a Rojas Vade por algún miembro de su lista es perpetuar el fraude electoral que se cometió".
Una visión similar planteó su par Martín Arrau (IND-UDI), quien destacó que "el señor Rojas tiene un historial de enfermedades según decía su abogado y si él quisiera renunciar hay un mecanismo legal para hacerlo. Pero claro, uno se da cuenta hoy que no está el mecanismo de reemplazo y a ellos les preocupa perder un voto".
Mientras, Teresa Marinovic (IND) manifestó que "este señor usó razones médicas para hacer su campaña política y ganar votos. El mismo señor usó razones médicas la semana pasada a través de su abogado para atenuar su responsabilidad y ahora que podría usar sus razones médicas para renunciar de hecho, no lo hace".
"¿Por qué no lo hace? Para dejar a alguien, para decidir él quién queda o su grupo. De nuevo las razones políticas se anteponen a las normas básicas de decencia que uno esperaría que tuviera una persona que ha dado tamaño espectáculo. Hubiera esperado que tuviera una actitud distinta", subrayó.
Quien también abordó el tema fue el candidato presidencial de ese sector, Sebastián Sichel, quien lamentó que no hubiera "una condena directa de los sectores de izquierda, que hubieran pedido que él renunciara. Lo que vi fue más bien fue tibieza (…) estos son los casos en que hay que tener consensos mínimos".
"Mentir es malo, fingir una enfermedad en campaña es malo, no pagar las pensiones alimenticias es pésimo y, por lo tanto, si tenemos estos consensos en estos niveles básicos, sería bueno que todos hiciéramos gestos de decir este tipo de política no se tiene que permitir, vale para todos los casos de corrupción", recalcó.
Visión del Gobierno y expertos
Antes de que se produjera la declaración de Rojas Vade, el ministro Secretario General de la Presidencia, Juan José Ossa, recordó que para concretar la renuncia "no existe una salida legal clara y precisa pactada por la clase política, por el Parlamento y, en consecuencia, existen muchas dudas, sobre todo en el caso de los independientes".
"Ese es un problema de origen en la forma de reemplazar, no sólo miembros de la Convención sino también del Parlamento y probablemente se pudiese requerir algún tipo de modificación, pero no nos corresponde a nosotros como Gobierno, porque eso sería derechamente inmiscuirnos en la composición de la Convención", advirtió.
En esa línea, Ossa sostuvo que "si hoy hay algunas circunstancias que obviamente nos han preocupado y desilusionado mucho, esa es una conversación que tiene que tener la propia Convención, los parlamentarios. No nos compete a nosotros como Gobierno, porque
podría verse no sólo como inmiscuirse donde no hemos sido convocados".
"No queremos legislar con nombre y apellido. Si existe un consenso de la clase política, en orden a que se requiere una serie de modificaciones para efectos de regular esta situación, por supuesto que nosotros siempre vamos a escuchar, derechamente contribuir, colaborar, pero no nos corresponde ser quienes tenemos la iniciativa", dijo.
Quien si recogió el guante ante esta situación fue el diputado de RN, Tomás Fuentes, quien señaló que si bien la renuncia "debió ocurrir hace dos semanas cuando se destapó la gran mentira, es algo que le hará bien a la Convención. Ahora nos toca en el Congreso hacer una reforma constitucional para concretar su salida y establecer el mecanismo de reemplazo".
Desde el punto de vista jurídico, el abogado constitucionalista Javier Couso explicó a EmolTV que "jurídicamente hay un vacío legal, un vacío constitucional, algo que el actual Congreso no pensó de manera detallada”, por lo que recomendó que “acá hay que ser práctico, ninguna persona debe ser forzada a asistir".
"Estamos hablando de una situación breve, en el caso de un parlamentario sería más complicado, pero acá estamos hablando de 9 meses y lo más probable es que esto se quede así, en una renuncia oral, fáctica. Mi pronóstico es que a menos que haya una ley corta, otorgar atribuciones al TC para calificar la renuncia no sería útil", dijo.
Finalmente, el jurista y académico de la Universidad Autónoma, Pablo Contreras, comentó que "la renuncia lo que hace es descomprimir políticamente el problema que había generado en la Convención, de haber sido electo y generado toda una falsa impresión o una mentira sobre su enfermedad".
"Ahora, jurídicamente quedan algunos problemas, primero, si se debe seguir aplicando el estatuto de los parlamentarios. Una alternativa es que políticamente la Convención de forma interna pueda dar una salida a esto y generar un mecanismo jurídico, pero hay algunos abogados y profesores que han desechado esa vía", advirtió.
En ese contexto, recordó que por ahora la renuncia "solo se puede establecer por fuera de la Convención, es decir, a través de una reforma al capítulo XV de la Constitución", junto con recalcar que "hay un tema distinto de la renuncia que es la vacancia y eso si genera muchos más problemas del punto de vista jurídico".