El fiscal nacional, Jorge Abbott, instruyó a la Unidad Especializada Anticorrupción (UNAC) analizar los antecedentes que fueron difundidos el fin de semana relativos a la compraventa de la Minera Dominga, "que involucrarían al Presidente Sebastián Piñera, con el fin de determinar si ameritan o no la apertura de una investigación penal", dice el comunicado enviado esta tarde por el Ministerio Público.
La información, publicada por Ciper Chile y LaBot el domingo pasado, sostiene que el jefe de Estado habría intervenido en el traspaso de sus acciones por US$ 152 millones a Carlos Alberto Délano en las Islas Vírgenes Británicas, lo cual es descartado por el Mandatario.
"Con ese propósito, la UNAC ya solicitó a la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente todos los antecedentes vinculados a la causa conocida como Exalmar-Dominga, que concluyó en 2017, los que se esperan ingresen mañana a la Fiscalía Nacional". añade el documento.
Asimismo, el Ministerio Público indicó que "la Unidad Anticorrupción se abocará a analizar si los hechos revelados en los Pandora Papers fueron conocidos por parte de la Fiscalía en el marco de la investigación anterior, y si esos hechos constituirían delitos en Chile".
Y finalmente señala que "concluido lo anterior, a UNAC recomendará al fiscal nacional eventuales cursos de acción a seguir".
En un punto de prensa en La Moneda, el Mandatario dijo que "no es cierto que haya una información nueva, esa información está contenida en el proceso y además conocida en la prensa", aludiendo a lo que señaló la investigación periodística: que el tercer pago estaría sujeto a que no se decretara ninguna medida de protección medioambiental en la zona donde se instalaría el puerto.
"Pero además quiero decir algo muy claro, lo voy a decir en forma muy de fondo, como Presidente de la República jamás he dejado de privilegiar el interés público, el bien común por sobre cualquier otro interés", sostuvo.
Piñera asimismo manifestó que "es de público conocimiento" que desde abril de 2009, "hace ya más de doce años y antes de asumir mi primera Presidencia, me desligué absoluta y totalmente de la administración y gestión de la empresas familiares", así como de otras en que tuviera participación.
Con ello, recalcó que la decisión de vender minera Dominga en 2010, "lo cual no me fue consultado ni informado fue precisamente para evitar cualquier asomo de conflicto de interés, el no haberlo hecho, podría haber originado algún conflicto de interés".