A dos años del 18-O, el arquitecto y miembro del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano, Iván Poduje, realizó un análisis del escenario actual que vive el país y cuáles han sido las consecuencias que ha dejado el estallido social.
"La ciudad hoy día es más segregada que hace dos años, es una ciudad más violenta y más insegura, y lo que pasa es que, lamentablemente, toda la discusión se centra en la Plaza Baquedano (...) pero definidamente la ciudad está peor que antes y tiene barrios completos que las esquirlas del estallido todavía se notan, incluso en el Metro", detalló en
EmolTV.
Bajo esa línea, Poduje contextualizó cuáles han sido las consecuencias del estallido social, tanto en ámbitos de comercio, como en infraestructura y urbanismo. "Hay varios registros del daño, casi 200 locales de supermercados, ferreterías, grandes locales, 1.200 pymes, 130 estaciones de metro con distintos niveles de daño, de ellas, 27 completamente destruidas. No hay ningún registro de algo parecido en la historia moderna en cuanto a la destrucción de una ciudad, como en el estallido hace dos años", recalcó.
Si bien, el urbanista señaló que "hoy día se han reparado algunas cosas", aún existen "25 puntos donde hay mucho daño, donde nunca más volvieron a aparecer servicios y comercios que había, espacios públicos que aún están muy deteriorados".
Acorde con el arquitecto, esta situación no afectó solo a la región Metropolitana o al sector de Baquedano, pues "en Valparaíso tenemos una situación bien crítica, hay cuadras en el centro Condell, Esmeralda que nunca más se recuperaron, con cortinas vacías y edificios quemados. Tenemos, por lo tanto, una baja en el empleo asociada al comercio minorista, un deterioro muy importante de los espacios públicos".
De acuerdo con Poduje, el daño "se puede revertir en la medida que hagas un plan de inversión y un despliegue de recuperación de 'territorio perdido' por parte de Estado. No olvidemos que la componente de violencia que se vivió en estos 25 puntos, que nunca se habla de ellos, implicó ataques a comisarías que cuidaban barrios críticos, ataques consistentes que redujeron el poder de control de esas comisarías".
"Antes los Carabineros o las comisarías tenían un radio de acción que podía controlar de 15 a 20 cuadras a la redonda. Con el estallido, las comisarías reciben mucho ataque y las policías están debilitadas. Están muchos con licencias, agotados. Entonces ese radio se achicó a 5 cuadras, y en ese espacio que quedó hoy día operan bandas, tienen menos seguridad, tienen más violencia, más balas locas. Entonces,
es una ciudad más insegura que antes", agregó el arquitecto.
Con respecto a las manifestaciones y destrozos que se podrían registrar durante el día de hoy, Poduje hizo un llamado a que los "políticos de todos los lados hagan un llamado a la paz, a la reflexión. (...) si llegan a haber desmanes y actos de violencia, espero que todos los políticos, de izquierda a derecha, los condenen sin matices, porque si eso no ocurre, vamos a instalar la impunidad, y los que más van a sufrir, van a ser aquellos que viven en las comunas afectadas por esta informalidad y violencia".
Por ello, el arquitecto concluyó que "si el diputado Boric y la senadora Provoste no retiran sus proyectos de indulto, no hacen un mea culpa por haber tratado de indultar a personas con antecedentes de violencia intrafamiliar y tráfico de drogas, que fueron detenidos saqueando y golpeando Carabineros. Si ellos no hacen eso, no tienen ninguna legitimidad para gobernar o van a gobernar sin una legitimidad para imponer orden público".
