Ni las 15 horas continuas que habló la semana pasada el diputado Jaime Naranjo (PS) ni la formalización que hoy hicieron tres de sus colegas de la oposición por cerca de dos horas, fueron suficientes para convencer a los senadores para que hoy aprobaran la acusación constitucional en contra del Presidente Sebastián Piñera, por lo que este lunes al no alcanzarse el quórum necesario, el libelo fue rechazado y con esto el Mandatario podrá permanecer en su cargo hasta marzo próximo cuando termine su período.
Los senadores, que actuaron como jurado luego de que la Cámara aprobara de forma inédita una acusación en contra de un Jefe de Estado, debieron resolver por separado respecto de los dos capítulos -bastaba que solo se aprobara uno para ser acusado- imputados por los diputados de Nuevo Pacto Social y Apruebo Dignidad, en donde lo cuestionaron por su eventual participación en la venta de la Minera Dominga. Haber infringido la Constitución y las Leyes y haber comprometido gravemente el honor de la nación, eran los cargos en su contra en este juicio político en donde arriesgaba además del cese de sus funciones, no poder ejercer cargos públicos durante los próximos cinco años.
Para que se aprobara se requerían 29 votos y considerando que la oposición tiene 24 representantes, se necesitaba que al menos cinco de los 19 oficialistas respaldaran el libelo. Sin embargo al iniciarse esta jornada, ya se daba por conocido el resultado al aplicarse los mencionados cálculos.
"Independiente de la decisión que tome cada uno y cada una de las senadores de oposición, (esta acusación) no será aprobada. La defensa cerrada y ajena a los antecedentes de las y los senadores de la derecha que respaldan al Gobierno, lo harán imposible", dijo la candidata presidencial, Yasna Provoste (DC), quien expuso su voto cerca de las 18:00 horas cuando restaban poco más de cuatro horas de discusión.
Fueron 22 senadores, todos de la oposición, que aprobaron los dos capítulos de la acusación, a ellos se sumaron Francisco Huenchumilla y la presidenta del Senado, Ximena Rincón, ambos DC, quienes respaldaron solo el primero y rechazaron el segundo -de hecho según confirmó Emol entre las sumas y restas internas se contaba a la senadora Rincón como abstención, ya que así lo había comunicado más temprano a la oposición- Por otro lado, 18 del oficialismo votaron en contra de los dos capítulos.
Este jueves comenzó con una primera sesión matutina para escuchar los antecedentes de la acusación constitucional, formalizados por los diputados Gael Yeomans (CS), Leonardo Soto (PS) y Gabriel Silber (DC) y por otro lado, habló la defensa representada por el abogado Jorge Gálvez, ambas partes con sus respectivas réplicas y dúplicas. Desde el Gobierno asistieron a la Sala acompañando al representante del Mandatario, los ministros Juan José Ossa (Segpres) y Jaime Bellolio (Segegob) .
Posteriormente, tras un receso de una hora, los senadores iniciaron la votación entregando su argumentación. Al anunciarse el voto número 14 en contra del libelo (de la senadora Luz Ebensperger, UDI), más la abstención ya declarada por Manuel José Ossandón (RN), se supo cuál sería el desenlace, a pesar de que quedaba poco más de una hora de debate.
Argumentos
Al aprobar el libelo, el senador
Guido Girardi (PPD) planteó por ejemplo que “todos queremos que haya trabajo y si Chile tiene un mineral, lo pueda desarrollar. Pero no para aumentar la codicia, la riqueza, y el egoísmo. Que para aumentar la rentabilidad de un proyecto se sacrifica uno de los patrimonios naturales más importantes que tiene el planeta, no solo que tiene Chile”.
“Esto es como los talibanes cuando demolían los patrimonios, cuando el ejército islámico entró a Siria a derrumbar los patrimonios históricos. Eso es lo que está haciendo las institucionalidad ambiental, teniendo la misma lógica de los talibanes y los ejércitos talibanes (...) Pero acá ni siquiera con una visión ideológica, es con una visión de miseria, para aumentar la rentabilidad de los super ricos para que sean más ricos, en desmedro de un patrimonio que le pertenece a todo el país”, subrayó.
El senador Manuel José Ossandón (RN), quien fue el único voto de abstención sostuvo: “Seré súper sincero y quizás la decisión que voy a tomar me genere más de una crítica, pero estoy tranquilo porque sé que lo estoy haciendo en consciencia. No hay que ser muy docto en el sentido común para darse cuenta que en este caso hay varios flancos abiertos y también falta de información, por lo mismo lamento de verdad que no todos los citados se presentaran a la comisión para entregar antecedentes a la causa. Eso a mi juicio oscurece la causa, aumenta las zonas grises, de un proceso que debiera ser totalmente transparente”.
“En la calle me dicen que no quieren más corrupción, que están cansados de las cosas oscuras en política (...) su confianza también se recupera actuando en instancias como hoy con consciencia, pero también con responsabilidad. Hoy no tengo los antecedentes concretos y objetivos para votar a favor de la destitución del Presidente, no me es posible concluir que existan actos de la administración del presidente Sebastián Piñera que sean susceptibles a encuadrar o subsumirse en algunas de las causas constitucionales. Insisto que si tuviera una pizca de la prueba lo haría porque mi primera responsabilidad es con el país y no con una persona. La estabilidad de Chile es cuidar la figura presidencial pero no a cualquier costo, la primera forma de garantizar la institucionalidad, al menos para mí es que un presidente respete las normas que todos los chilenos estamos obligados a cumplir”, agregó.
En tanto, uno de los que expuso a favor, el senador Rodrigo Galilea (RN) planteó que no es posible que el Senado de Chile pueda hacerse parte de algo tan mal hecho. Esta historia parece muy buena, Pandora Papers, paraísos fiscales, hijos del presidente, proyectos firmados en una rea sensible ecológica, altos montos del negocio, da para escribir un gran libro de ciencia ficción, pero eso es muy distinto de una acusación constitucional, más aún es muy distinto para ocupar ese tipo de primicias para acusar al Presidente, la más alta autoridad elegida democráticamente en Chile”.
“Construir una historia falsa, denigrar orquestadamente, después decir que esa persona no reúne las condiciones de honorabilidad para finalmente derivar todo esto en una acusación constitucional, es una práctica que es realmente matar a una persona. Yo jamás voy a ser parte de una maniobra como esta”, declaró el oficialista.