Si la Convención Constitucional fuera un vehículo, su velocidad en estos meses de instalación y participación popular se habría mantenido cerca de los 60 km/h. A partir de enero, el órgano constituyente avanzará con el doble de velocidad hacia su destino final: llegar a mitad de abril con todas las normas constitucionales aprobadas y listas para la etapa de armonización del texto.
Para eso, la acción principalmente ocurrirá al interior de las siete comisiones temáticas, que hasta el minuto se han dedicado a recibir audiencias de la sociedad civil para incorporar los planteamientos de la ciudadanía en las normas a elaborar.
Esta semana fue la última semana de audiencias para casi todas estas instancias y desde la próxima comienza el trabajo de escritorio. El cronograma aprobado de la Convención establece que
a fines de enero, las comisiones tienen que despachar las primeras propuestas al pleno para su votación.
"Enero y febrero completos son discusión y debate de normas. El 27 de diciembre empezamos ya a discutir. Ahí empezaremos debatiendo seguramente cómo vamos a discutir las normas y después empezaremos a ver las propuestas que han empezado a llegar a la comisión. El ritmo creo que se resume en una palabra: intensísimo", explica Beatriz Sánchez (FA), coordinadora de Principios Constitucionales.
Esa comisión definió trabajar en tres tandas sucesivas de temas: la primera es principios constitucionales y normas del derecho internacional aplicadas al derecho chileno. La segunda es democracia y mecanismos de democracia directa y la tercera es nacionalidad, ciudadanía y preámbulo de la Constitución.
La Comisión de Sistema Político, que decidirá si Chile continuará con un régimen presidencialista o no, partirá también en estos meses con esa definición, además de normas sobre el sistema electoral y el Estado plurinacional y libre determinación de los pueblos.
"La fecha de la entrega del primer informe está para el día 2 de febrero, por lo tanto, ahí van a estar ya las primeras normas votadas para debatir en el pleno", dice Rosa Catrileo (mapuche), coordinadora de esa comisión.
Todo este proceso se enmarca en el fin del plazo para el ingreso de iniciativas de norma e iniciativas populares, que concluye el 6 de enero. Después de ese tiempo, según el cronograma, ya no es posible presentar propuestas.
“El ritmo de trabajo será muy arduo, con mucha deliberación, mucha propuesta, porque claro, no solamente tenemos que presentar propuestas hasta fines de enero los convencionales, sino que tenemos que presentar propuestas de norma en todas las temáticas que tiene la comisión”, agrega Catrileo.
La situación de las demás comisiones
En esa misma situación está Sistemas de Justicia, dirigida por Vanessa Hoppe (MSC) y Christian Viera (Ind. cercano al FA), cuyos bloques temáticos son tres y el primero que se abordará durante enero es la "función jurisdiccional en un amplio sentido: poder judicial, justicia administrativa y pluralismo jurídico", según explica Viera. En estos días, los constituyentes de esa comisión presentarán propuestas que crean una corte constitucional y un consejo de la judicatura, con firmas transversales.
La Comisión de Sistemas de Conocimiento, en tanto, comenzará con el debate la próxima semana, y deben abordar el primero de tres ciclos de discusión.
"El primer ciclo contiene
derechos y garantías, derecho a la cultura, conocimiento, ciencia; y garantías como libertad de expresión, de investigación, de creación. Eso en términos muy generales. Además están los derechos digitales, que incluye el derecho a la protección de datos privados y toda la discusión en torno a la conectividad. Por último, el derecho a la comunicación, también hay una parte de bioética y patrimonio", comenta Ignacio Achurra (FA), uno de los coordinadores de esa instancia.
Enero y febrero también serán frenéticos para la Comisión de Derechos Fundamentales, que es la encargada de enviar al pleno el catálogo de derechos que contemplará la nueva Constitución.
“Son dos meses claves para la discusión constitucional, por nuestra parte tenemos que despachar dos informes con propuestas de normas y sus respectivos articulados durante esos meses, en materias de gran importancia, como lo son las titularidad de los derechos y sus garantías, por otra parte, el segundo informe será despachado sobre normas que versan sobre derechos sociales , tales como educación, vivienda y trabajo, entre otros”, explica Matías Orellana (Colectivo Socialista), uno de los dos coordinadores.
El cronograma interno de esa comisión fija para el 30 diciembre la votación en general de algunas normas y la apertura del plazo de indicaciones.
Forma de Estado y Descentralización determinó que la primera semana de enero empieza la deliberación sobre normas relativas a la forma jurídica del Estado.
"Debemos votar en general, indicar y votar en particular las normas que vayan configurando el capítulo de la forma de Estado, autonomías, cargas tributarias y territorios especiales y ruralidad. Una vez evacuada cada una de estas grandes materias con informes favorables al pleno seguimos la deliberación con la siguiente", explica Jeniffer Mella, coordinadora de esa instancia.
La Comisión de Medioambiente es la que comenzará más tarde: por el alto número de audiencias que recibieron, el plazo de escucha a la sociedad civil termina el 20 de enero y el 25 de enero tienen recién la primera votación programada internamente.
Los plazos
Los plenos de votaciones de normas constitucionales están programados desde el 8 de febrero, que sería el primero, hasta el 22 de abril, que está indicado en el cronograma como la última fecha para votar normas que, por no alcanzar el cuórum necesario, irían al plebiscito dirimente si este fuera tramitado por el Congreso.
El 27 de abril, la mesa entrega el proyecto de nueva Constitución; y el día siguiente comienza el trabajo de la Comisión de Armonización, que tiene que velar por la coherencia del texto final. La primera semana de junio se abre el plazo de indicaciones para ese texto final y el 25, 26 y 27 de ese mes concluye la votación de esas modificaciones. Así, la primera semana de julio termina el trabajo de la Convención.
No obstante, el calendario aprobado por la Convención se puede modificar: de hecho, esta semana se aprobó una reforma al reglamento que permite que la mesa, a pedido del pleno, reagende o suspenda semanas territoriales, con el fin de hacer más eficiente el trabajo de debate y votación de normas.
