No hay una sola interpretación para lo que el Presidente Gabriel Boric aseveró el viernes en conversación con Chilevisión, cuando aseguró que, de ganar el Rechazo, tendría que haber un nuevo proceso constituyente y, por lo tanto, una nueva elección de convencionales.
Pero sus declaraciones fueron enarboladas por el sector que está en contra de la propuesta de nueva Constitución, que argumentaron que Boric confirmó que hay una opción real para esa postura; y molestaron a varios defensores del Apruebo, quienes consideraron que así se pavimentaba el camino para rechazar el proyecto de Carta Magna.
Para Kenneth Bunker, politólogo y director de Tres Quintos, el Mandatario primero valida el plebiscito de entrada, pero también "es un hecho simbólico en tanto legitima la opción del Rechazo. Eso no lo habíamos escuchado hasta ahora. El Presidente había estado siempre a favor del Apruebo, por lo tanto legitimar la opción del Rechazo lo hace válido ante muchas personas del mundo de la centroizquierda e izquierda a quien simplemente no les gusta el texto. Abre la posibilidad de empezar a soñar de nuevo con nuevos constituyentes, nuevas ideas, de aprender de este proceso".
Por eso, según Bunker, el efecto deriva en "una muy mala noticia para el Apruebo y una muy buena noticia para el Rechazo".
¿Se abre otra vía?
En esa línea, el académico de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, hace énfasis en otro punto: la apertura de una "tercera vía" en el debate público, que intentaría empujar a las fuerzas políticas a construir ese otro escenario.
"El Presidente Gabriel Boric ha abierto una tercera vía en medio de la campaña por la nueva Constitución. Y sobre ella entonces coloca ciertas ideas a debatir en cuanto a las características que debe tener este nuevo proceso. Deja atrás la discusión de 4/7 y delinea que debe ser electa y nueva constituyente. Ahí está el giro de la discusión política", explica el analista.
Según Duval, esta es una decisión "de vital importancia" para el proceso, porque a pocas semanas del Plebiscito, Boric allanaría el camino para otra alternativa además de aprobar la nueva Constitución o quedarse con la de 1980. "De alguna manera, está diciendo 'la política tiene que ir a construir este otro escenario, esa es la tercera vía'".
"El Gobierno se abre a una negociación", plantea en cambio Axel Callís, director de Tú Influyes. "Lo que hace el Presidente es determinar los términos por los cuales podría haber una negociación. En el fondo, claramente está mandando un recado a la derecha y dice 'si esto lo vamos a hacer de nuevo, hay que hacerlo bajo esta modalidad'. Esto, en el fondo, es un 15-N 2.0".
Por eso Callís también remarca que el Presidente dijo otra cosa en la entrevista: que hay "disposición" para modificar y "mejorar" la nueva Constitución, si gana el Apruebo.
"Yo creo que fue casi un pensamiento en voz alta, porque es una reflexión donde está abriendo posibilidades distintas, pero en el fondo, lo que está haciendo es plantearse por primera vez en un plan B o plan C. Es decir, hay un mandato, y si esto fracasa, hay un camino. Pero para evitarnos ese camino podemos negociar, si es que el Apruebo gana, cuáles son los tópicos", comenta Callís.
Qué efectos puede generar este escenario abierto a partir de sus declaraciones es lo que aborda Eugenio Guzmán, sociólogo y decano de la Facultad de Gobierno UDD, que plantea dos posibilidades. "Por un lado, llamar a una mayor movilización para el apoyo al Apruebo y asimismo evitar que figuras disruptivas de la Convención desaparezcan del escenario para no afectar la opción. Pero también, podría ser un anticipo en el sentido de desanclar al Gobierno del resultado".
Sobre si mejorará o no la posición del Rechazo respecto a cómo está ahora, Guzmán asegura que "no me parece tan claro", pues "la influencia de Boric es redundante sobre sus partidarios, ellos ya están convencidos. ¿Si los indecisos podrían verse más influenciados? Se trata de personas que tal vez no voten, no tengan muchas expectativas del proceso o son otro tipo de eventos, como los escándalos, o la situación económica, que los mantiene en esta situación de volatilidad".
El fuego cruzado con los sectores más duros
Pero donde sí podría generarse un efecto inmediato es en su mismo sector, sobre todo entre los partidos más a la izquierda de Apruebo Dignidad, que han sido muy reticentes a abrir otras posibilidades más que Apruebo o Rechazo.
"Creo que es un acto de responsabilidad del Presidente Boric. Se pone en situación de un triunfo del Rechazo y del necesario acuerdo posterior. Ahora, sin duda provocará molestia en los sectores más duros del Frente Amplio y del PC", dice Gonzalo Müller, académico de la UDD.
En eso ahonda Mauricio Morales, académico de la U. de Talca, que prevé que "se va a generar un profundo malestar especialmente en los sectores más duros de la coalición. Eso es inevitable. Un acuerdo explícito que existía en el gobierno era no abrir puertas a caminos alternativos frente a un eventual triunfo del Rechazo. Y lo que hizo el Presidente fue precisamente eso".
"Puede que algunos sientan esto como una estocada al corazón del proceso constitucional", concluye Morales.
