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Qué universidades integran el G9 y cuáles son sus críticas sobre el rol de las públicas no estatales en la propuesta constitucional

El rector de la Udec, Carlos Saavedra, hizo una presentación ante la Comisión de Desafíos del Futuro del Senado, con las principales preocupaciones de la red de instituciones que representa.

02 de Agosto de 2022 | 11:50 | Por Cecilia Román, Emol.
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El G9 había presentado una iniciativa popular de norma que sobrepasó las 15 mil firmas y fue discutida en la Convención.

Comisión Desafíos del Futuro
Problemas de financiamiento futuro para universidades públicas, falta de vinculación con la ciencia y una "desconocimiento" del sistema actual de generación de conocimiento en Chile fueron parte de las conclusiones sobre el borrador constitucional que exhibió el presidente del G9 y rector de la U. de Concepción, Carlos Saavedra, en una presentación que hizo ante la Comisión Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación del Senado.

Saavedra se presentó este lunes en nombre del G9, la Red de Universidades Públicas no Estatales que agrupa a la U. Católica, U. de Concepción, PUCV, U. Técnica Federico Santa María, U. Austral, U. Católica del Norte, U.Católica del Maule, U. Católica de la Santísima Concepción y la U. Católica de Temuco, y abordó los principales problemas que atañen a este grupo sobre el proyecto de nueva Carta Magna.

En la intervención, Saavedra remarcó que el G9 participó en el proceso a través de una iniciativa popular de norma que se titulaba "Educación superior inclusiva y diversa, con compromiso público, regional y producción de conocimiento de excelencia" y que buscaba fortalecer el rol de las universidades públicas, independiente de si eran o no estatales.

Esta propuesta fue una de las 77 que logró sobrepasar las 15 mil firmas requeridas para entrar al debate de las comisiones, pero, según Saavedra, "esto no fue recogido de la manera que esperábamos y en el texto se recoge mayormente el quehacer en el ámbito de la educación superior estatal, en detrimento, entendemos nosotros, de nuestras instituciones".

Esa es una de las principales críticas que hicieron desde el G9: que las disposiciones del texto constitucional sobre educación superior están mayormente orientadas a las instituciones estatales.

"Lo que esperábamos era que se recogiese la historia, que se resguardara el rol de todas las universidades independiente de su propiedad o de la modalidad de provisión. En el caso nuestro, a todas las universidades públicas no estatales, nos deja al arbitrio de la ley, de la que desconocemos sus alcances", criticó Saavedra.

"Lamentamos que representa un desconocimiento histórico al desarrollo del sistema educacional superior en Chile y por lo tanto pone en riesgo los aportes en innovación, investigación y conocimiento. Esperamos que, dados los eventos que puedan ocurrir en el próximo tiempo, esta sea una materia que se pueda corregir en los años o meses que vienen", afirmó el rector de la U. de Concepción.

En ese punto, la Red de Universidades Públicas No Estatales plantea que era necesario garantizar un trato "equitativo" entre las instituciones públicas del Estado y no estatales; lo que implicaba entregar garantías de autonomía en la gestión y en el régimen de financiamiento simétrico, sin discriminación y en condiciones de equiparación con las instituciones estatales, "lo que no queda expresamente claro en la propuesta constitucional", decía la presentación.

De hecho, afirmaron que "el texto no refleja la tradición universitaria chilena y proyecta graves consecuencias para el sistema educativo nacional", y que deja ver un "desconocimiento del sistema actual de generación de conocimiento en Chile, poniendo en riesgo los aportes en innovación, investigación y conocimiento".

La falta de mención a la ciencia


Otro punto que preocupa al G9 es la falta de mención "relevante" de las ciencias en el proyecto de nueva Constitución. Según planteó Saavedra, "la palabra ciencia aparece solo destacada dos veces y no necesariamente se establecen estas vinculaciones entre la educación superior y la investigación".

El peligro de esto, según transmitieron desde el G9, sería una falta de garantía sobre el financiamiento de estas actividades, lo que esperaban que fuera incorporado en el texto.

"Si bien el artículo 96 garantiza la libertad de investigación, no garantiza el compromiso a un financiamiento incremental (...) Chile desde el año 1967, en que se crea el Conicyt, hasta la fecha, no ha cruzado la barrera del 0,4% del PIB, así es que lo que podría haber sido un cambio de relevancia constitucional al quedar consagrado, no aparece", concluyó el rector.

Las aprensiones previas y la discusión


Esta no es la primera vez que el G9 se pronuncia sobre el contenido del proyecto de nueva Constitución. En el viaje de la Convención a Antofagasta, el rector de la UCN, Rodrigo Alda, entregó una carta a la mesa directiva del órgano constituyente mostrando "preocupación" sobre los artículos aprobados en el pleno en cuanto a este punto.

Posterior a aquello, la Comisión de Armonización empezó a trabajar en la corrección de las normas que quedaron mal redactadas, y el artículo sobre educación superior fue uno de los que discutió esa instancia.

Ahí hubo un grupo conformado por la izquierda (MSC y FA, entre ellos) que buscaba fusionar dos incisos de la norma para dar a entender que el financiamiento era únicamente para las universidades estatales. Eso no se logró, y ahora, según reconocen ex convencionales, quedó "confuso", y se puede interpretar con mayor amplitud que las que estarán incorporadas en ese financiamiento no son solo son instituciones del Estado.
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