Un duro golpe sufrió ayer el Gobierno. Un golpe que, en los papeles, no estaba en la agenda de nadie. La Cámara de Diputados rechazó la reforma tributaria, proyecto clave para el programa de la administración Boric pues de allí saldría el grueso de los recursos con los cuales La Moneda buscaba financiar reformas y medidas emblemáticas.
Con 71 votos en contra, 73 a favor y 3 abstenciones, la Sala de la Cámara rechazó por mayoría la idea de legislar la iniciativa, dado que los votos en contra y las abstenciones sumaron más que los apoyos.
En medio de su gira a Tarapacá, anoche el Mandatario abordó el traspié, endosando la responsabilidad a la oposición: "Hay un sector que intenta hacer que las cosas no cambien, dejar las cosas tal cual como están. Pareciera que no aprendemos de las lecciones del pasado. Y es que a veces parece que el objetivo de algunos es golpear al Gobierno e impedir los cambios".
Sin embargo, Boric invitó "a que esta fractura no nos domine y a que la superemos. Quiero que sepan que ocuparé todo mi liderazgo y pondré a todo nuestro Gobierno a trabajar para construir una mayoría que sí haga posible esta reforma".
Más temprano, la derrota fue lamentada por el titular de Hacienda, Mario Marcel, quien indicó que pese a las negociaciones impulsadas por La Moneda, la presentación de cerca de 90 indicaciones, ocho meses de tramitación y un proceso de diálogo con la ciudadanía, "la ideología se impuso sobre el pragmatismo, se impuso sobre el diálogo".
Y pese a que el ministro y más de un diputado oficialista dio cuenta del impacto que esto tendría en las reformas propuestas por el Gobierno, el Ejecutivo deberá decidir se repone el proyecto en el Senado, para lo cual necesitaría dos tercios para aprobarlo, o espera un año más para retomar la discusión en la Cámara.
Señal de unidad de la oposición y el factor Ávila
Conocidas eran las críticas de los diputados de Chile Vamos y de Republicanos al proyecto y a las cuales se sumaron ayer con sus votos parlamentarios del PDG, ex miembros de ese partido y también ex DC, algo que ya la tarde del martes estaba cerrado.
Esto como una forma de dar una señal concreta al Gobierno, al cual acusaron de no tener apertura para dialogar. Al interior de la oposición afirman que, por una parte, hay "un castigo" a la gestión del Ejecutivo, pero principalmente se rechazó un "mal proyecto" por sus consecuencias en la economía.
Desde el sector incluso sostienen que esta "nueva mayoría" opositora que se unió contra la reforma tributaria podría repetirse en nuevas votaciones, por ejemplo, en materia de pensiones. Allí, sostienen, que hay "coincidencias" en que es un mal texto y que el Gobierno está "enamorado" de su reforma.
"No pudimos ser más claros en que esta era una muy mala reforma, radical, alejada de la realidad, despreocupada de la necesidad que requiere Chile de crecer, de que aumenten los salarios, de que Chile vuelva a ser un lugar confiable para invertir. Esta reforma tributaria si se hubiese aprobado hubiera generado un daño inmenso en la economía que habría perjudicado particularmente a la clase media y a las familias más vulnerables", sostuvo el jefe de la bancada UDI, Guillermo Ramírez.
Por su parte, el jefe de la bancada de diputados RN, Frank Sauerbaum, dijo a Emol que ahora "el Gobierno puede hacer varias cosas, puede replantear el proyecto en un año más, puede insistir en el Senado y también puede ir presentando partes separadamente donde más acuerdo hubo (...) Y el resto es ir olvidándose de todo lo que le pegue a la inversión, al ahorro, a la generación de empleos, porque ahí no van a haber votos ni ahora ni nunca, dada la situación económica que afecta al país"
En el rechazo fueron claves, por ejemplo, las tres abstenciones de los diputados Andrés Jouannet (Amarillos por Chile), Gaspar Rivas y Enrique Lee. Pero también algunas ausencias en la Sala como es el caso de la diputada Viviana Delgado (del Partido Ecologista Verde), quien el lunes protagonizó una fuerte discusión con el ministro de Educación, Marco Antonia Ávila. Esto generó que su partido cortara relaciones con el Gobierno, hasta que el titular del Mineduc deje el gabinete.
Tampoco estuvo en la sesión la diputada Pamela Jiles (PH), quien acompañó a Delgado en una declaración tras la pelea con el ministro. También se ausentó la diputada Mónica Arce.
Y si bien en el rechazo a la reforma tributaria hay varias aristas, en el oficialismo se cree que el impasse entre el ministro y la diputada vino a tensionar aún más la situación y se convirtió en un efecto colateral.
¿ En qué afecta?
El impacto del "golpe" a la reforma tributaria es algo que sin duda marcará la agenda del Ejecutivo, pues son varias las reformas, medidas y proyectos que dependían de los recursos que ésta iba a recaudar.
Tema que fue abordado durante la tarde de ayer en una reunión entre la ministra del Interior, Carolina Tohá, y el Presidente Boric, antes de que este dejara La Moneda para emprender su gira a Tarapacá. Todo en medio de la expectativa que hay de un pronto cambio de gabinete.
"Entendemos que hemos hecho una serie de compromisos y naturalmente apenas acaecido hace una hora este rechazo a la idea de legislar la reforma tributaria, el Presidente junto al ministro de Hacienda tomarán las decisiones que correspondan para poder hacer un nueva evaluación del escenario en que nos encontramos", expresó la ministra de la Segores Ana Lya Uriarte.
Según han señalado, la reforma de pensiones y la reforma al sistema de salud, estarían entre aquellas medidas afectadas. Así lo explicó el ministro Marcel: "Se rechazó la idea de que exista una reforma cuyos recursos fueran a financiar el aumento de la PGU, la reducción de las listas de espera en los hospitales o el aumento para la salud primaria".
Otro ejemplo de aquello está en las medidas anunciadas ayer por el Presidente Boric en el marco de la conmemoración del 8M, en lo que respecta a la Sala Cuna para Chile, iniciativa que busca equiparar legalmente el derecho a sala cuna para madres y padres, sin depender del tamaño de la empresa, incluyendo además a trabajadoras independientes y trabajadoras de casa particular.
"Esta propuesta, que recoge iniciativas ya presentadas anteriormente y que se financiaría con la reforma tributaria, incorpora principios de igualdad de género y corresponsabilidad. Esta iniciativa integra el diálogo con los diversos sectores involucrados para la consagración del derecho de mujeres y niñas y niños", se expone en un documento que recoge los anuncios hechos este miércoles.
A través de su cuenta de Twitter, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, acusó que "rechazaron la reforma tributaria que permitía aumentar pensiones, mejorar la salud primaria y disminuir listas de espera, aumentar comisarías, financiar salas cunas para Chile. Rechazaron para seguir evadiendo impuestos. Es una derrota para quienes buscan un país desarrollado".
La diputada Emilia Schneider (CS) sostuvo que al rechazarse la reforma tributaria, "pierde el país completo. Perdemos la posibilidad de financiar derechos sociales, financiar mejores pensiones para los jubilados y jubiladas y de fortalecer los servicios públicos para todas y para todos. ¿Quiénes ganan? Los súper ricos que eluden y evaden impuestos, los delincuentes de cuello y corbata que se enriquecen a costa del resto, promoviendo una sociedad de abusos".
En tanto, el diputado Daniel Manouchehri (PS) consideró que "la derecha no le ha propinado una derrota al Gobierno, la derecha le ha propinado una derrota al país. Hoy día les han dado un portazo a los recursos necesarios para subirle las pensiones a los chilenos y para combatir al crimen. No nos parece cuando vemos que la derecha celebra por un triunfo político y una derrota social para los chilenos”.
Se espera además que el Gobierno convoque al oficialismo a un comité ampliado para abordar el tema.