Alcaldes, concejales, gobernadores y cores, esas son las autoridades que este año podrán elegir los chilenos durante las elecciones de octubre próximo. Comicios que, de prosperar la idea en el Congreso, se realizarán en dos días, con el fin de reducir los tiempos de votación y evitar grandes aglomeraciones.
Lo anterior pues se estima que cerca del 80% del padrón (de unos 13 millones de electores) concurrirá a las urnas, tomando en cuenta el regreso del voto obligatorio. Por ello, se espera una alta participación, a diferencia de lo que ocurrió en procesos anteriores con el sistema voluntario. Además, al existir cuatro papeletas, se cree que las personas tendrán que zanjar sus preferencias entre un gran número de candidatos, los que en algunas comunas podrían superar los 100 postulantes, demorando aún más el tiempo en la cámara secreta.
Por otra parte, se trata de comicios que son vistos como claves por el mundo político, desde donde consideran a las municipales como la antesala y un indicador de lo que podría pasar en la presidencial y la parlamentaria del 2025.
El panorama según los expertos
¿Serán entonces estos comicios más importantes que otros o por lo menos nos darán una foto más realista del panorama actual? Es una pregunta que un grupo de expertos consultados por Emol, responden a continuación.
En ese escenario, el experto electoral y ex diputado Pepe Auth, comentó que todas las municipales son "igualmente importantes" y un anticipo de la presidencial. En esta ocasión, sin embargo, acotó que "lo nuevo es que su resultado es mucho más incierto, porque votará cerca del doble de personas que en la elección anterior, la mitad de ellas lejanas a la clientela municipal. Si hasta ahora se trataba de quién movilizaba más a sus simpatizantes para que concurrieran a las urnas, ahora se trata de convencer a quienes no tienen particular simpatía ni preferencia política de que voten por ti cuando concurran a cumplir con su obligación. Es un cambio de enfoque total en las campañas".
Pese a ello, Auth consideró que "estas elecciones son, sí, más importantes que las anteriores, porque no sólo se distribuye el poder municipal, sino también el regional. La elección de gobernadores y cores le agrega una relevancia inédita en las dos dimensiones, la de su importancia para las regiones, pero también para el gobierno actual y el gobierno que viene. Porque se puede gobernar teniendo menos alcaldes que la oposición, es más difícil si además buena parte de quienes gobiernan las regiones y definen sus planes de desarrollo están alineados también con la oposición".
Al igual que otros expertos, el académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, apuntó a los plebiscitos constitucionales como las elecciones más importante de los últimos años en el país. Sobre los comicios del 2024, sí destacó que "tienen la particularidad de ser las primeras en escoger autoridades locales mediante el régimen de inscripción automática y voto obligatorio, y en las que veremos el debut electoral de partidos nuevos como Demócratas y Amarillos. Adicionalmente, se espera un retroceso en el poder comunal y regional de los partidos de gobierno. Es probable que la derecha avance sustantivamente".
A la vez que cree que pueden ser un punto de inflexión para un cambio de gabinete, en caso de malos resultados para el oficialismo. "En general, los gobiernos absorben los resultados negativos mediante la modificación de sus equipos, lo que en este caso vendrá acompañado, además, de renuncias de ministros que quieran competir en la próxima elección de legisladores", acotó.
La foto del momento
Otro aspecto a analizar y en que coinciden todos, es que esta elección será una especie de foto del momento político y actual que atraviesa Chile, mucho más certero que en otras ocasiones, debido a la gran cantidad de personas que están obligadas a sufragar.
Morales manifestó que "con voto obligatorio, que supone un mayor volumen de participación, tendremos una medición más realista de la fuerza electoral de cada partido, coalición y tendencia política (...) los partidos se medirán en el universo total de electores y no sólo en los votantes más intensos que salían a sufragar en el contexto del voto voluntario".
Eso sí, advirtió que "deberemos prestar muchísima atención a la magnitud de la votación inválida. Es decir, el voto nulo y el voto blanco. El rechazo a la clase política que se expresaba con abstención electoral bajo el voto voluntario, ahora podría tener como salida una alta tasa de votación inválida".
En tanto, Auth precisó que "es bueno para el funcionamiento de la Democracia, la legitimidad de sus autoridades que, en lugar de 5 a 6 millones, participen 10 a 12 millones de personas en la elección de sus autoridades (...) Es de todas maneras mejor para la democracia que participe la mitad del país más alejada de la política, la que sus votos no están determinados por una alineación a un determinado marco ideológico y político, sino más bien al sentido común, a las prioridades ciudadanas, a las urgencias, que votan según dónde y cómo les aprieta el zapato (...) Desde 2004 -2008, 2012, 2016 y 2021- las elecciones de Alcaldes han anticipado en su resultado la siguiente elección presidencial".
En esa línea, el académico de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián Kenneth Bunker, destacó que estas elecciones son importantes para "entender qué tan herido salió el país como resultado de la crisis. Estos 4 o 5 años tumultuosos del estallido social hubo mucha inestabilidad, creo que el resultado de esa elección va a hablar bastante sobre dónde estamos parados ahora y va a ser un faro para entender lo que va a pasar en la presidencial".
A su juicio, "lo que hacen este tipo de elecciones formalmente es fijar posiciones de negociación para las elecciones que son más importantes. Todos los candidatos presidenciales y partidos políticos van a estar mirando esta elección para entender dónde están en términos de capacidad de negociar cupos para la legislativa y de estrategias para la presidencial. Nada más representa un reflejo de donde está el país políticamente".
Lo anterior, pues según recordó Bunker, "primero nos fuimos para la izquierda con el primer proceso (constitucional), después para la derecha. Creo que hoy hay un debate importante de qué tanto nos hemos normalizado, que tan estable está Chile después de todo esto y esto nos va a indicar dónde está el voto", si a la izquierda, al centro o a la derecha.
Asimismo, Paola Assael, de Black & White, expuso que "efectivamente se miden fuerzas y es importante, porque es un voto obligatorio bastante representativo de lo que está pensando el país. Pero hay que tener en cuenta que en las elecciones de alcalde y gobernadores pesa mucho la persona, pesan mucho las características personales de cada uno (...) De todas maneras, el voto obligatorio acerca mucho más la votación a lo que es el pensamiento de los chilenos (...) la votación es mucho más representativa de lo que están pensando todos los chilenos, y no solamente los más activos como era antes".
Para Marco Moreno, académico de la Universidad Central, "siempre las elecciones locales han tenido un carácter más bien predictor de las parlamentarias y presidenciales, lo era cuando teníamos voto obligatorio, bajó un poquito su predictibilidad cuando teníamos voto voluntario, pero ahora que volvemos al voto obligatorio con inscripción automática, evidentemente la predictibilidad va a ser mayor. Es la mejor encuesta electoral que tendremos respecto a las elecciones del 2025".
"Va a ser predictora de lo que podría ser el escenario electoral del próximo año, de si el país se ha movido y no sólo en la lógica de derecha, centro e izquierda, sino que respecto de lo que sea el encuadre de la campaña que va a estar fuertemente influido por la crisis de seguridad (...) va a comenzar a mostrarnos una nueva geografía electoral de Chile en el sentido de cómo queda la correlación de fuerzas entre los partidos y la aparición de este bi-coalicionismo polarizado, estas dos grandes coaliciones" de oficialismo y oposición, puntualizó.
Pero además Moreno, piensa que son importantes, porque "el país cambió y vamos a ver cómo está entendiendo la gente ese cambio. Este movimiento del péndulo de la demanda de cambio, con el estallido social hacia delante, con la demanda ahora de orden y seguridad".
"La seguridad es por lejos el tema más importante, si tú no tienes las necesidades básicas cubiertas donde una necesidad básica fundamental es la seguridad, entonces uno no aspira a las otras (...) no existe ningún candidato hoy en día que no prometa seguridad, aquí la diferenciación es a quién le creen que efectivamente va a tener la fuerza, la consistencia con la seguridad", complementó Assael.
