"Estamos frente a un
psicópata". En eso coinciden los expertos a la hora de analizar a
Hugo Bustamante. Hoy se cumple una semana desde que la PDI encontró en su casa de Villa Alemana los cuerpos de Elena Hinojosa y su hijo Eduardo Páez.
Fue él mismo quien, en una entrevista con una periodista, reveló que en 1996 los había matado y enterrado en su domicilio en la Región de Valparaíso. Luego, se lo comentó a un gendarme.
"Un psicópata es una forma de ser,
no una enfermedad, y si está preso o libre, él sigue funcionando de forma psicopática", explica
Mauricio Valdivia, psicólogo forense y ex comandante del OS9 de Carabineros.El
comisario Gonzalo Luján, del Instituto de Criminología (Inscrim) de la PDI, complementa con que "la psicopatía no es un trastorno mental, porque la persona, en este caso él,
tiene plena consciencia de lo que hace, tiene conciencia forense. Es por eso que él oculta los cadáveres, porque sabe lo que viene después de ese hecho".
El experto de la policía civil entrega detalles que definen la personalidad de Bustamante. "Nace en un círculo familiar con
padres maltratadores, violentos, con consumo de alcohol, en donde no recibió quizás el trato que uno esperaría en la primera infancia y todo lo contrario, recibió más que todo violencia. Él a los 11 años ya abandona su hogar, comienza con el consumo de drogas, comienza también a llevar una vida promiscua. Incluso él,
antes de cometer su primer homicidio, que hoy sabemos que fue en el año 1996 él ya había cometido al menos 19 delitos antes de esa fecha. Eso habla también de la versatilidad criminal de este sujeto".
"Grandiosidad" y pueden haber más revelaciones
¿Por qué revelar casi 30 años después estos crímenes y por qué de esta forma? "Él
no ve la afectación en su conducta, tiene una actitud de grandiosidad, busca sentirse famoso y admirado", comenta a La Estrella de Valparaíso el
psicólogo de la PUCV, Claudio Esparza.Valdivia coincide también en lo de
"grandiosidad". "Es un elemento central en la psicopatía, es un
narcisismo maligno, como le denominamos, una sensación de superioridad, en el cual él es el centro del universo. Después de muchos años, volvemos a hablar de él. Eso buscaba. En eso se diferencian de un delincuente común, que intenta no contar lo que ha hecho. Él no, él se jacta".
Para Luján, "tiene que ver con el
egocentrismo y el fuerte narcisismo que tienen. Finalmente, ellos deciden con quién, dónde y cuándo revelan sus delitos. Si es que le cayó en gracia a la periodista, que de alguna manera sintió que era la persona indicada para hacerlo. Y le hace un regalo, tal como él lo explica, lo expresa"..
El experto de Carabineros agrega que Bustamante resuelve sus conflictos "eliminando a las víctimas, las hace desaparecer. Y todo ese proceso a él le genera placer".
Incluso, Valdivia advierte. "
No sería descabellado que en un tiempo más confesase otros crímenes, cuando la atención ya se haya ido de él. Hay que estar muy atentos".
Lo que es apoyado por Luján. "No se puede descartar. No podemos ni afirmarlo ni descartarlo. La verdad es que ya teniendo los antecedentes que obran respecto de la vida de este sujeto,
no se puede descartar por ningún motivo. En la conducta humana nunca podemos decir no hay ninguna posibilidad o es 100% seguro. Ahí, digamos, hay un marco amplio donde pueden pasar muchas cosas".
