El 2023 cerró como el año con menos nacimientos de la historia, lo que se convierte en una preocupación para el país: las tasas de natalidad siguen profundizando su caída. Este primer cuatrimestre, la cifra cayó un 22% respecto del mismo período del año pasado y un 25% si se compara con 2022. Como "alarmante" calificó la situación el presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Reproductiva, Aníbal Scarella, quien sostuvo que "nuestro país está envejeciendo a una tasa sin igual de los países occidentales (...) No creo que haya nada más importante que esto". Lo anterior es respaldado por la tasa de fecundidad de INE, la que alcanzó un promedio de 1,2 hijos en 2021, cifra muy por debajo de la necesaria para mantener el tamaño de la población (2,1). Entre las razones se encuentra la pandemia y una readaptación de las familias, cambio en la visión de vida, necesidades económicas y la incorporación de la mujer al trabajo, esta última genera una "tendencia significativa a la postergación de la maternidad", indicó el jefe de medicina reproductiva de la Clínica Alemana, Patricio Donoso. A pesar de la anterior, se han mantenido los partos de alto riesgo y las cifras de recién nacidos hospitalizados, lo que se explica por el "retraso en el inicio del embarazo" y el aumento en "la fertilización asistida", explicó la pediatra neonatóloga de la Red UC Christus, Paulina Toso. Frente a lo anterior, la Sociedad Chilena de Medicina Reproductiva inició gestiones con el Congreso y el Minsal para la aplicación de políticas públicas en esta materia, como potenciar la educación en la población para que se conozca el riesgo de posponer la fertilidad, que se mejore la calidad de vida laboral y estudiantil de las mujeres, entre otras.
