Continua la tensión a propósito del anuncio del veto a la ley de la elección en dos días, que contempla el voto obligatorio y que presentará el Gobierno una vez finalizada la semana distrital. La iniciativa ha generado mucha molestia en la oposición, que ha criticado que el Gobierno cae en actitudes "antidemocráticas", "vulnera la Constitución" y los deja en una encrucijada, porque si deciden aprobar el veto estarían dejando sin multa a los extranjeros residentes con más de cinco años en Chile, y si optan por rechazarlo, el resultado será eximir de sanción el no votar, lo que en realidad, acusan, lo convertiría en sufragio voluntario. Pero también en el oficialismo es donde algunos altos dirigentes están planteando, en privado, que en realidad la intención del Ejecutivo podría ser que el veto se rechace, ya que en la alianza de gobierno tampoco están todos alineados con una única postura, y aquel resultado implicaría que no se castigue el hecho de no votar, posición que han defendido algunos dirigentes de la izquierda. A esa lectura se han sumado también en la derecha. De acuerdo con la presidenta de Evópoli, Gloria Hutt, "es evidente que el oficialismo está buscando dejar el voto voluntario, y es probable que la propuesta del Gobierno vaya en esa dirección".