Durante la mañana de este sábado aterrizó en el aeropuerto de Santiago el embajador de Chile en Venezuela,
Jaime Gazmuri,
quien fue recibido por el ministro de Relaciones Exteriores,
Alberto van Klaveren, y la ministra del Interior,
Carolina Tohá.
Luego de sostener una reunión, las autoridades entregaron un punto de prensa en el que el canciller resaltó que proclamar a un candidato ganador en Venezuela, es "prematuro", ya sea por Nicolás Maduro o Edmundo González. Sin embargo, dijo creer que "es probable" que el aspirante opositor haya sido el vencedor.
"Nosotros estamos siguiendo muy de cerca la situación en Venezuela, nos preocupa extraordinariamente también y esperamos que no se sigan produciendo hechos de violencia. Sabemos que se va a producir en el día de hoy una manifestación y esperamos que se respeten los derechos de los venezolanos, que no hayan violaciones de sus derechos humanos", dijo en primer lugar.
Después, y respecto de la situación política, expresó que "nosotros reiteramos que el resultado que ha entregado el gobierno venezolano del proceso electoral no resulta transparente, que no se basa en información que esté disponible para todos, y al mismo tiempo, aspiramos a que tengamos un proceso de verificación de esos resultados".
"Creemos que cualquier proclamación de candidatos ganadores es prematura, obviamente eso vale para el presidente actual, Nicolás Maduro, que ha sido proclamado en dos ocasiones, pero sí un proceso electoral que sea verificable. Estamos evaluando los pasos a seguir, y eso lo haremos también en conjunto con otros países de América Latina, en un diálogo constante. Respetamos mucho la figura del Edmundo González, creemos que es probable que haya ganado la elección, pero no lo podemos afirmar con certeza, básicamente porque estamos hablando de un proceso electoral que no ha sido verificado", precisó.
Hay que mencionar que Gazmuri volvió a Chile porque el régimen de Nicolás Maduro decidió expulsar al personal diplomático de su país, después de que el presidente Gabriel Boric no reconociera su "triunfo" (que ha sido duramente cuestionado por la oposición venezolana y la comunidad internacional) en las elecciones del domingo pasado.
El canciller volvió a rechazar la actitud del presidente venezolano enfatizando en que "lamentamos profundamente esta medida inédita que adoptó de manera absolutamente injustificada el gobierno del señor Nicolás Maduro. Es una medida inédita, como lo hemos dicho anteriormente, es una medida que realmente habla muy mal de las prácticas diplomáticas de un gobierno de un país latinoamericano".
