Pese a que este fin de semana se ratificaron las diferencias oficialistas sobre el régimen de Nicolas Maduro en Venezuela, luego que el presidente del Partido Comunista, Lautaro Carmona, haya negado la existencia de una dictadura en el país vecino, ningún presidente de la alianza de Gobierno quiso elevar el tono de la pugna.
En privado, las dirigencias del oficialismo abordaron la postura del PC sobre Venezuela en la reunión que tuvo lugar este lunes a las 9:00 horas en la sede del Partido Socialista.
Allí los partidos aliados hicieron ver a Carmona la complejidad que radica en su defensa hacia el régimen chavista. Luego, las dirigencias del Partido Socialista, el Partido por la Democracia y el Partido Liberal, optaron por reunir a sus directivas para efectos de tratar la situación.
El abordaje significó un contraste a la forma en que el oficialismo venía administrando sus disensos por el conflicto venezolano. Semanas antes, el timonel del PPD, Jaime Quintana, puso bajo cuestión el renovar la alianza con el PC en caso que la tienda política no reformule su apoyo al régimen de Maduro.
Dejando atrás ese tono, este lunes, Quintana reconoció que en la síntesis del PC de este fin de semana, "hay un pequeño avance, si uno lo mira en función de lo que fue la declaración inicial de ese partido. Sin prejuicio aquello, parece que es insuficiente".
Para explicar lo anterior, algunos dirigentes apuntan a una necesaria cautela de cara a las elecciones municipales y regionales de este 27 de octubre. Algunos bregan por mantener a raya las diferencias con tal de mantener la unidad del pacto "Contigo Chile Mejor", que aúna desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista.
Según personeros del oficialismo, las declaraciones cruzadas entre partidos a raíz del conflicto venezolano, pueden confundir a los electores. Por ejemplo, quitando respaldos de las huestes de PC a candidatos del Socialismo Democrático, en una comuna determinada donde el sector sea la única alternativa del ala progresista.
"Yo lo he dicho más de una vez, comparto y respaldo las palabras del Presidente de la República, Gabriel Boric Font, que ha tenido un liderazgo clave en materia internacional y particularmente respecto de la situación venezolana".
Irací Hassler (PC)
Consultada por los disensos oficialistas respecto a Maduro, la ministra de la Segegob, Camila Vallejo, consideró que las "diferencias probablemente tendrán que seguirse discutiendo entre los partidos. Si no hay entendimiento, si no hay comprensión de las aproximaciones políticas, las definiciones sobre el régimen en Venezuela
, tendrán que discutirlas en el ámbito del respeto, de la sana convivencia".
En ese contexto, uno de los principales cuadros del PC, la candidata a la reelección como alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, evitó pronunciarse sobre la negación de Carmona respecto a una dictadura en Venezuela.
"Yo lo he dicho más de una vez, comparto y respaldo las palabras del Presidente de la República, Gabriel Boric Font, que ha tenido un liderazgo clave en materia internacional y particularmente respecto de la situación venezolana", sostuvo.
Y añadió: "Los distintos partidos y también el Partido Comunista había señalado anteriormente que se debían transparentar las actas, eso lo ha reiterado y por eso yo agrego en ese sentido que hay un proceso que no se puede validar cuando eso no ha ocurrido. Y en ese sentido valoro el liderazgo que ha tenido el presidente de la República que ha sido muy claro".
Debate
En ese contexto, analistas políticos abordaron el posible costo político que Venezuela pueda llevar al oficialismo en los comicios del 27-O.
El académico de la Universidad Central, Marco Moreno, advirtió que "la 'venezuelanización' de la conversación política en Chile esta generado una polarización que no solo ha revelado fisuras dentro del oficialismo, sino que también podría tener repercusiones significativas en las próximas elecciones de octubre".
"La postura del Partido Comunista frente a la situación en Venezuela, que ha sido duramente criticada por sus propios aliados,
podría convertirse en un punto de quiebre para los votantes, especialmente aquellos de origen venezolano", sostuvo.
Y añadió: "Si esta tendencia persiste, es probable que veamos un realineamiento electoral basado en la percepción pública de la relación de los candidatos con el régimen de Maduro, lo que podría redefinir la dinámica de decisión electoral en varias comunas y regiones del país".
A su vez, el investigador del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES) y asociado a Faro UDD, Rodrigo Pérez de Arce, indicó que "sin duda, la postura del Partido Comunista respecto a Venezuela afecta su imagen electoral, aunque es difícil cuantificar el impacto exacto en la coalición".
"No sé si alcanza para que alguien de izquierda se convenza de apoyar a Chile Vamos o Republicanos solo por este tema. Con todo, el régimen de Maduro será tema, especialmente considerando las graves violaciones a la democracia perpetradas por la dictadura venezolana y las consecuencias en la migración que tiene que se mantenga el régimen chavista", adujo.
De ese modo, consideró que "la estrategia del PC parece enfocarse en movilizar a quienes están desilusionados desde la izquierda con el Gobierno de Boric, que se ha visto obligado por las circunstancias a moderar sus posiciones en temas clave. Esta táctica genera tensiones dentro de la coalición de izquierda de cara a las próximas elecciones, como lo ha hecho durante todo este periodo gubernamental".
"Incluso, aunque afecte menos en la elección, de no producirse cambios significativos, es probable que estas divisiones persistan y se agudicen en el futuro", acotó.
Por su parte, el académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, afirmó que "si bien la disputa interna de la coalición de Gobierno por la crisis política en Venezuela incide en el orden y la disciplina de los partidos que la componen, a nivel electoral será mucho más relevante el impacto de la crisis de seguridad pública y la situación económica".
"Los electores, probablemente, vean la discusión sobre Venezuela como un asunto de elite, mientras que los problemas de seguridad y economía se sientan como más cercanos. De hecho, y como es una elección local, los asuntos internacionales no debiesen ser decisivos, como sí lo podrían ser al momento de escoger Presidente de la República", agregó.
En ese sentido, apuntó que "si la crisis política en Venezuela continúa el próximo año, los candidatos necesariamente tendrán que tomar postura, cuestión que no es exigida por los electores para los candidatos a cargos locales".
