El ministro secretario general de la Presidencia, Álvaro Elizalde, se refirió este sábado a la reforma al sistema político que busca impulsar la administración de Gabriel Boric, señalando que se deben hacer cargo "del problema que enfrenta la atomización y división extrema".
El secretario de Estado participó esta jornada de la ceremonia la ceremonia Fraternitas de la República de la Gran Logia de Chile, instancia donde abordó la necesidad de fortalecer la democracia y promover el combate a la corrupción.
"El lema del encuentro es preservar la democracia con integridad y tolerancia, cuyo espíritu tiene plena vigencia ven un contexto de polarización política y social que, si no se enfrenta a tiempo, debilita la democracia. Y el Presidente Boric tiene un compromiso claro e inequívoco con la democracia", manifestó Elizalde al inicio de su intervención.
Luego, señaló que "fortalecer la democracia también es fundamental promover la integridad pública y ello requiere avanzar en el combate a la corrupción. Esta es una tarea que atraviesa y que compromete a todo el Gobierno, pero que toca particularmente al Ministerio de Secretaría General de la Presidencia que encabezo". Por ello, recordó sobre el envió de un proyecto de ley de Lobby 2.0 durante realizó el Ejecutivo durante el primer semestre de este año. "Esperamos que tenga una rápida tramitación en el Congreso" , solicitó.
Posteriormente, haciendo hincapié en la urgencia a una reforma al sistema político, afirmó: "La democracia es un proceso de construcción colectiva, continua, que no está exenta de amenazas".
"¿Alguien habría pensado como un hecho posible el asalto al Capitolio de la democracia más antigua de América o un asalto de similar naturaleza en Brasilia? Enfrentamos tiempos complejos en que muchas veces el camino fácil del populismo", ahondó.
En esa línea, aseveró que es "imprescindible Chile impulsemos una reflexión respecto de cómo preservar y cuidar adecuadamente nuestra democracia. Ello va más allá de promover el respeto irrestricto a la diversidad como el principal valor de la sociedad chilena".
"Existe la tendencia de creer que el que tiene la razón es el que grita más fuerte. Pero quienes tienen que actuar de esa forma no creen en sus propias convicciones. Cuando se descalifica a quien piensa distinto, no se está enfrentando a una idea, está reconociendo implícitamente que no cree en las ideas propias", agregó.
Elizalde insistió en que "necesitamos un sistema político" que se adapte a las demandas de la ciudadanía. " Debemos reconocer que las diferencias que existen en nuestra sociedad tienen que resolverse de manera adecuada para que la ciudadanía perciba los cambios y sienta que estos mejoran su calidad de vida".
"Nos parece que es imprescindible generar formas que fortalezcan la convergencia de quienes comparten visiones, valores y principios en orgánicas y partidos políticos, en que todos trabajen por promover esas ideas y no que tengamos lo que hoy vemos, divisiones que muchas veces responden a querellas personales y no a concepciones diferentes respecto de cómo se construye un Chile mejor", concluyó.