La Escuela Popular de Artes (EPA) anunció su cierre luego de 26 años por inviabilidad financiera. La institución ubicada en Viña del Mar estaba envuelta por diversas acusaciones de maltrato, tanto a funcionario como apoderados, además de una denuncia por acoso sexual contra el presidente de la Corporación CreArte, Eduardo Cisternas.
Fundada en 1998, se salvó "milagrosamente" de verse envuelta por las llamas del megaincendio ocurrido en febrero en la Región de Valparaíso.
La reciente noticia desató las manifestaciones por parte de sus 30 trabajadores que fueron recientemente despedidos, a las que también se sumaron los apoderados de más de 120 alumnos, quienes de un día para otro fueron notificados que quedarán sin su espacio de desarrollo musical.
Según comunicó el directo interior de la Escuela Popular de Artes, Christina Aguilar a El Mercurio de Valparaíso, la clausura se debe a la escasez de patrocinios que reciben por parte de inversores extranjeros, desde Alemania y Luxemburgo. Por eso, el Ministerio de Culturas decidió retirar su cofinanciamiento, el que era entregado a través del programa PAOCC.
"Para poder funcionar bien, la escuela recibe un 50% de aportes nacionales y un 50% de aportes extranjeros. Si se cae uno, se cae el otro, porque para acceder al programa PAOCC hay que cofinanciarlo", explicó Aguilar, confirmando que la institución está "en proceso de cierre".
En línea con lo anterior, los 15 funcionarios a contrato fueron despedidos, a lo que se suma la finalización de vínculo con los 17 profesores a honorarios. Por esto, se han presentado denuncias en la Inspección del Trabajo.
Respecto a la finalización de los contratos, Aguilar sostuvo que "se les despidió como lo dice la ley. A todos se les pagó todo. La escuela con el tema de los pagos tiene un historial estupendo", atribuyendo el descontento a que "es una medida que no es popular".
Aguilar, quien ejerció como directo titular de la institución entre 2017 y 2019, sostuvo que la decisión de cerrar la escuela "creo que nos duele a todos de alguna manera, pero hay una realidad. Cuando nos dicen que tratamos la escuela como empresa, claro que es así, porque necesitamos una manera para jamás dejar de pagarle a los empleados su sueldo y que tengan sus cotizaciones al día".
Miembro del Consejo Municipal de Viña del Mar, Pablo González (PC) lamentó el cierre, expresando que la EPA "tiene una relevancia histórica que le ha dado un reconocimiento en el desarrollo de las artes en nuestra comuna. Eso debería ser un elemento suficiente para que el directorio de esta corporación se replanteara la decisión que ha tomado, considerando el impacto negativo que esto va a generar".
