El ministro de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, se enfrentará a un adverso escenario mañana. A partir de las 10:00 horas los senadores comenzarán a fundamentar sus votos sobre la acusación constitucional en su contra. Posteriormente, se abordará el caso de la suspendida ministra Ángela Vivanco, cuyo destino parece estar sellado debido a la amplia mayoría que votaría en su contra.
La incertidumbre que rodeaba a Muñoz ha aumentado considerablemente tras darse a conocer la decisión de la senadora Paulina Núñez (RN), quien presentó un permiso constitucional, modificando el quórum necesario para la aprobación del libelo. Cabe recordar que Núñez se encuentra con permiso de posnatal y no asistió a los alegatos de este martes.
Con la aceptación de este permiso, el quórum para la aprobación de la acusación se reduce de 26 a 25 votos, lo que significa que solo se requerirá el apoyo de los senadores de derecha para destituir a Muñoz. Sin embargo, dado que los legisladores actúan como jueces, no han adelantado su votación, por lo que aún podrían haber descuelgues en el sector. En ese caso, un voto clave podría ser el del senador Matías Walker (Demócrata), quien será el último en argumentar (por orden alfabético) y podría definir el futuro de Muñoz.
Esta modificación podría permitir que la oposición logre destituirlo y prohibirle el ejercicio de cargos públicos durante los próximos cinco años.
Según parlamentarios socialistas habría poco margen de acción para enfrentar esta maniobra, ya que en estos casos solo queda acatar el permiso aceptado por la Corporación. Sin embargo, se reunirán para analizar la situación.
Presentación de la acusación al Senado
Durante este martes, los acusadores—Gustavo Benavente (UDI), Ximena Ossandón (RN) y Jorge Guzmán (EVO)— y las defensas de ambos magistrados, presentaron sus argumentos.
El equipo jurídico de Sergio Muñoz incluía a los abogados Jorge Correa Sutil y su hijo Juan Correa Serrano, así como al excontralor Ramiro Mendoza. Fue el propio Muñoz quien negó las acusaciones en su contra, advirtiendo que "si se aprueba la acusación, se debilita la independencia del Poder Judicial". Además, enfatizó que no existen pruebas que sustenten lo que se le imputa, señalando que se trata de inferencias realizadas por los acusadores.
El diputado Gustavo Benavente (UDI) sostuvo la acusación y señaló que "la señora (Graciel) Muñoz suscribió promesas de compraventa por inmuebles en un proyecto inmobiliario que se vio afectado por una resolución del Segundo Tribunal Ambiental que fue objeto de un recurso ante la Corte Suprema. Tras oírse los alegatos de la inmobiliaria por la tercera sala de la Corte Suprema, presidida por el ministro Sergio Muñoz, el proyecto de acuerdo sobre el caso habría sido puesto en conocimiento por el magistrado Muñoz a su hija antes de que sea un fallo público y notificado, lo que convinó a la hija a intentar desistirse de las promesas de compraventa suscritas tras conocer la traba que el fallo judicial significaría".
Tras la sesión, el diputado Jorge Guzmán señaló que "ha quedado debidamente acredita el incumplimiento grave de deberes de ambos ministros y esperamos que el Senado resuelva en su mérito, marcando un presente y un mensaje importante respecto a resguardar la integridad, independencia y probidad del Poder Judicial".
Se prevé que mañana será una jornada extensa, en la que los senadores contarán con hasta 10 minutos para fundamentar su votación sobre Muñoz y otros 10 minutos para el juicio contra Vivanco.
